“Para mí sería un verdadero honor ser el presidente del partido”, manifestó Roberto Olivetti, vocal impulsado por sus pares para ese cargo. En ese sentido, explicó que el orden sucesorio indica que ese lugar debiera ser ocupado por Marcos Salcedo, quien también desecharía ocupar el cargo.
Olivetti explicó que su intención es “ordenar y arreglar algunas falencias de la casa partidaria y hacer llegar una carta conciliadora al afiliado, invitándolo a renovar su compromiso con el centenario partido”. Asimismo, agregó que debido a “desaciertos y ambiciones desmedidas de muchos dirigentes del orden nacional, regional y local, se ha dejado herida de gravedad ala UCR”.
En tanto, está pendiente una próxima reunión donde podría definirse si Olivetti ocupará la presidencia provisoria del Comité.