
«Por ahí habia un poco de dificultades en el turno tarde porque mucnos planteaban dar clases hasta las 15 horas pero desde Agmer planteábamos que no se soluciona nada con dar clases desde las 12.30 hasta las 15 o convocarlos a los 15 porque son los horarios que más calor hace», dijo Chapitel. Por ello, indicó que trabajaban esta mañana con la Direccion Departamental de Escuelas para lograr la suspensión de las clases en todas las escuelas en horas de la tarde.
El jueves de la semana pasada, pidieron que se suspendieran las clases en la escuela Integral 1. Al día siguiente, el Director Departamental de Escuelas, Fabián Vallejos, les permitió suspender a la tarde ese día, y hoy pueden salir antes y no acudir en horas de la tarde. «Mañana se va a ir viendo», acotó Flores.
A veces, hay problemas con la bomba de agua y en ocasiones tarda mucho en cargar. «Nos quedamos sin agua», manifestó la docente. A eso se le sumó que hubo un corte de luz el jueves de la semana pasada. «Los ventiladores, por más que los arreglen, no dan abasto. El otro día fue un papá a arreglarlos pero es un ventilador por sala», indicó.
En la escuela Integral N° 1, los chicos no se pueden expresar como en el resto de los establecimientos escolares. «Pueden decir si algo les molesta», dijo. Pero en ese establecimiento, los alumnos muchas veces no pueden expresar que les pasa. Las docentes deben agudizar los sentidos para darse cuenta si hay algo que no está como debería. El jueves de la semana pasada, muchos chicos se descompusieron. «Les pusimos colchonetas y tratamos de refrescarlos un poco pero, al venir en el colectivo de la institución, no tenes como decirles a los padres que los retiren porque vienen en el colectivo», indicó Alejandra.
A todo ello, hay que añadir que algunos chicos no controlan esfínteres. Por ello, los padres se quedan las cuatro horas de clase para cuando se necesita cambiarlos. «Se quedan afuera, parados en el sol. Tratan de buscar sombrita, les damos agua fresca pero no dan abasto», indicó Alejandra.
Concepción del Uruguay
En tanto, en La Histórica, a través del pedido del gremio Agmer las escuelas comenzaron a reducir el horario de trabajo a la mañana y se suspendieron las clases a la tarde. Una tercera opción se dio en algunos establecimientos que no recibían ninguna instrucción de la Departamental de Escuelas: no colocaban falta a quienes no acudan en estos días.
«Nosotros estamos, desde ayer domingo, con un alerta rojo sobre del departamento. Por lo tanto hoy, algunas escuelas que ayer no habian tomado la decisión, hoy, en estos establecimientos están recurriendo a la suspension o a la reduccion horaria», resaltó Fimpel.
Fimpel dijo que en su vida activa como docente es la primera vez que le toca vivir una ola de calor como la actual. Pero ello deja a las claras la situacion edilicia precaria que permanentemente denuncian. «Hay escuelas que no tienen ventiladores. Otras escuelas que tienen ventiladores rotos y cuando los encienden todos al mismo tiempo, baja la tensión eléctrica. Eso demuestra que el cableado necesita una inversión urgente pensando en estas inclemencias», indicó Fimpel.
Las adecuaciones se deben realizar más aún pensando en como vienen los cambios climáticos de aquí en adelante. En ese sentido, citó el caso de las escuelas que tiene aulas vidriadas donde da el sol en horas de la tarde. Y si bien cuentan con ventiladores, estos son insuficientes para mitigar el calor. «No son edificios pensados para la realidad nuestra ni para este lugar», sostuvo.
En algunos establecimientos, hay techos de chapa. «Por lo tanto, el calor que se genera ahí genera un efecto invernadero que ba a todas las aulas», remarcó. «Hay escuelas que no tienen árboles, tienen inmensos patios de cemento», dijo.
«El agua, cuando se abre la canilla, sale caliente. Con estos días no permite que se puedan refrigerar los tanques. Por lo tanto, hay escuelas con poca agua o sale caliente. No hay dispensers con agua fria para que los chicos puedan tomar agua fria por mas que llevan de su casa la botellita con agua fria. Al rato ya está caliente. No es solamente el aire sino el como esta el edificio ambientado», indicó Fimpel.
Por último, Fimpel indicó que el alerta rojo indica psibles riesgos para la salud a chicos en edades que concurren a jardines maternales y a los primeros años de las escuelas primarias. Y el trslado hasta la escuela en las zonas rurales suele ser complicado en jornadas de tanto calor cuando salen en moto al rayo del sol del mediodía o cuando las docentes deben hacer dedo para llegar a localidades sin colectivos o el viatico (establecidos en un adicional al sueldo que figura como ‘traslado’) es insuficente para pagar los escasos medios de transportes disponibles.