LOS MEDIOS…OPOSITORES
Luego de la movida mediática que intentó hacerle creer a la sociedad que en las PASO hubo fraude, los opositores, que sintonizan todas las ondas que lo tengan al gobierno como blanco, se creyeron la movida mediática a la que se sumaron con gusto. Desde hace tiempo muestran que les cabe más la fuga hacia adelante que explicaciones difíciles, como esta, de dar cuenta a sus fieles de las razones de tan pocos votos para ellos en las urnas.
Esa movida tendiente a enturbiar las pasadas elecciones de agosto, que ya quedó descarta por su absoluta insolvencia y una escasez de militantes que ya no ocultan los llevó a plantearse una unidad en la acción impensada hace apenas un tiempito atrás, Busti, Giorgio y el PRO.
De este modo, aquí en Concordia decidieron solicitar a la justicia electoral que capacite a las autoridades de mesa, en rigor, una de decisiones que se tomó en la reunión de anoche.
Asimismo, los candidatos en busca de cartel y de acciones políticas que lo ubiquen en las primeras planas, pensaron en un acto en el Auditorium donde los candidatos a Intendentes puedan mostrar sus propuestas de gobierno. Petit fue la que se mostró más entusiasmada con la idea “está convencida que tiene una propuesta insuperable”, dijo un militante del sector que no le tiene demasiada simpatía porque cree que es una mala candidata, tan mala que en las caminatas se pelea con los vecinos, dijo.
DEL TRIUNFALISMO A LOS MENSAJES GUERRERISTAS QUE SIMULAN ÉPICA
Ya son muchos los que cuentan que en los últimos actos, Busti comienza a reconocer una posible derrota. En uno de ellos dijo “quédense tranquilos que, si llego a perder en buena ley se los voy a reconocer”, fue en un acto del Nebel hace más de una semana.
Ese baño de realidad llegó a su léxico luego de la aplanadora de agosto y dista de ese discurso triunfalista con el que había acostumbrado a sus fieles : “en octubre vamos a reventar las urnas” ; “los vamos a pasar por arriba” ; “les voy a zapatear en las espaldas” y otros de ese estilo.
Ahora, su lenguaje es igual de virulento pero ya no habla tanto de lo que les va a pasar a los otros, sino a él.
Así, días pasados en un acto realizado en el Círculo Italiano Jorge Busti se imaginó dispuesto a “derramar hasta la última gota de sangre en esta patriada”.
Se propone contagiar ese espíritu. Hasta ahora parece lograrlo con gente que, como él, tienen poca experiencia en dejar su vida por las ideas. Uno de ellos es el diputado Hugo Berthet, quien espetó “voy a morir con los ojos abiertos, voy a perder peleando”.
No es ocioso señalar que ese nivel de belicosidad solo tiene sosiego cuando llega el no peronista y aliado, Martín Jáuregui quien repite a su tropa, “esta no es mi guerra, pero igual vamos hasta el final”.
El otro dato que quizá explica el anterior es que, en este proceso y al menos en Concordia, es Jáuregui y no el bustismo quien aporta algo de estructura si, por esto, se entiende abrir subcentros. De hecho un comunicado del MARCO enviado a este diario dice textual que ese partido “continúa su aporte militante a la Campaña Busti Gobernador 2011 poniendo en marcha subcentros en prácticamente todos los barrios de la ciudad. Esta semana se habilitaron dos, uno en barrio Fatima I a cargo de Graciela y Noelia Vallejos y otro en La Bianca coordinado por Daiana Ramírez”.
LA FRIALDAD DE LOS NUMEROS
En las elecciones del 14 de agosto el oficialismo obtuvo alrededor del 47 % de los votos en toda la provincia y del 60 % en Concordia. Aunque la oposición en general señala y con razón que la de octubre será otra elección, no existe, al menos hasta ahora, ningún dato que de pista sobre que el votante cambiará su preferencia dentro de poco más de un mes.
Si esto quedara confirmado Busti, el radicalismo y el resto de los partidos se disputaran el restante 53 %. Si además y como ha quedado demostrado en varias elecciones anteriores, el radicalismo conserva su caudal electoral que, en Entre Ríos no es menor, Busti deberá estar pensando que puede quedar tercero con una cantidad de votos similar a la que obtuvo el peronismo disidente cada vez que compitió en las urnas. Esto es, el intento fallido del Nuevo Espacio 2003 y la Lista 100 que en el 2007 encabezó Solanas.
Nada salió como él lo había pensado. Él se imaginaba en andas de los hombres de campo con plata que festejarían “su compromiso” con la producción. En cambio y como todos sus competidores antes, Busti debe pelear desde el llano, sin aparato y, por sobre todas las cosas, sin esa prensa adicta de la que siempre se nutrió y viceversa. Paradójicamente, Busti aparece más en aquellos medios con los que él no simpatiza que en los que vivieron de sus generosas pautas.
Aunque aún resta el final de la película que se conocerá recién el 23 de octubre a la noche o en horas de la madrugada, ya ha quedado claro que el otrora hombre fuerte del peronismo confió demasiado en sí mismo. Se sobrevaluó, no comprendió el cambio de época, no percibió que la política había vuelto y con ella un debate enriquecedor. Creyó que su nombre podía competir y ganarle a políticas públicas de alto impacto social que están a la vista.