Según contó Sarachú, el hecho sucedió alrededor de las 10.30 de la mañana del martes 31, cuando un móvil de tránsito se estaciona en la bocacalle de Catamarca, pone dos conos y cuatro agentes se distribuyen en el lugar justo donde está el cartel de prohíbo detenerse ni estacionar. “Primer error porque están incumpliendo su propia ley”, remarcó. En eso, y a la vista de los de tránsito, ingresa una moto con un señor a cargar combustible y con el casco en brazo, el playero le vende y los agentes vienen directo a hacerle la boleta. “Cuando desde mi oficina veo que están discutiendo con mi encargado, bajo y me entero ahí de la supuesta infracción y de que querían multarlo por haberle despachado combustible al de la moto sin tener el casco puesto”, manifestó.
“Ahora…digo….Nosotros no somos policías ni baritas, ellos son los que tienen que cumplir la función de agentes y no obligarme a mí a hacerlo, ellos deberían haber prevenido, no dejarlo entrar o pararlo antes de que le carguen y no esperar a que termine para hacer la multa. SI ellos estaban viendo todo”, denunció. “Yo no discuto cuando las cosas están mal, pero sí la total saña de los tipos”, manifestó. “Esto no va a quedar así y voy a dar vueltas hasta lo constitucional porque ellos no pueden hacernos trabajar de agentes a nosotros cuando ni siquiera vinieron del municipio a informar oficialmente de esa ordenanza, ni entregaron carteles para no comprometer al empleado, ni nada”, agregó. “Ahora, voy a ver con mi abogado y si se puede hacer, yo decido que no voy cargar más nafta a las motos. Con o sin casco”, advirtió.
Después de todo lo que pasó, Sarachu cuenta que habla con su contador, Martin Santana, que a la su vez es el ex secretario de gobierno de Enrique Cresto, y le pregunta por la vigencia de la ordenanza ya que él recuerda haber participado, hace varios años, de reuniones con el ex jefe municipal, Gustavo Bordet, concejales, gente de tránsito y del sindicato de expendedores, donde se discutía justamente este tema porque estos últimos se negaban a tener que ponerse la ropa de policía y “hacer cumplir una ley que le corresponde al estado y no a nosotros”, reiteró.
“Hasta ahí había quedado en stand by. Pero ahora me entero que Bordet la promulgó en el 2013 y jamás a nosotros nos llegó una comunicación oficial, un enunciado, un cartel, nada y es la primera vez en 4 años que tienen una actitud de este tipo. Yo recuerdo, que habíamos quedado que si salía la ordenanza iban a emitir la información por todos lados, carteles en los surtidores para no comprometer al personal y toda una movida que jamás pasó. Como tampoco pasó que me hagan una multa por cargar con el casco en el brazo”, recordó.
“Con el tema del alcohol nosotros tenemos la cartelería y demás y, estemos de acuerdo o no, es así. Recuerdo cuando salió la ordenanza que hicieron todo un circo y me clausuraron el shop porque un turista se llevó una botellita chiquita de “DR. Lemmon” y se fue a tomarla a la plaza. Pero acá no sólo que no hay nada que prevenga sino que el agente estaba ahí, viendo todo y esperó a que termine de cargar para hacer la boleta”, finalizó.