"Vamos a actuar en el marco de un acuerdo político de gobernabilidad y salir de un default tiene que ser tarea de todos los argentinos, no de un sector político", alcanzó a decir Pichetto en medio de los gritos y silbidos de una parte de los congresales.
Acto seguido tomó la palabra Oscar Parrilli, quien fuera secretario de Cristina Kirchner, y expresó que la nueva dicotomía este año se resume en una consigna: "Patria o Buitres". Y fue tajante al calificar al gobierno de Mauricio Macri de "conservador y entreguista".
El exjefe de Inteligencia del kirchnerismo pidió que senadores y diputados justicialistas ratifiquen la renegociación de deuda iniciada por Néstor Kirchner, que culminó con Cristina en 2010, y que rechacen "cualquier negociación de la deuda externa pendiente con los holdouts".
En la misma línea se expresó Héctor Recalde, jefe del bloque de diputados FpV-PJ, quien sostuvo que "arreglar con los fondos buitre acarrea problemas a futuro".