En un comunicado enviado a DIARIOJUNIO, las organizaciones ecologistas se oponen a la construcción de la central hidroeléctrica binacional “por los múltiples problemas que las represas causan en los ríos, alterando sus cauces normales, inundando, afectando y desplazando a las personas de sus comunidades, destruyendo lugares históricos y causando la muerte de los ecosistemas y su biodiversidad”.
La represa se proyecta construir sobre el río Uruguay, al sur de Misiones y norte de Corrientes, con la participación de las costas de Brasil, en la zona de Río Grande Do Sul.
Según Raúl Orlando del Grupo Ecologista Cuña Pirú de Misiones «sste proyecto aumentaría la humedad de la región eliminando las heladas, que regulan naturalmente las plagas. También la descomposición de la materia vegetal inundada, produce gases que aumentan el efecto invernadero».