Las sanciones que aplicará el Municipio, siempre rigiéndose por el Estatuto del Empleado Municipal, contemplan la suspensión por 30 días –sin goce de sueldo- para el agente, Martín Sangalli, quien era la cabeza visible del reclamo. Pero también 20 días para 29 trabajadores, 15 días para otros 10 empleados y 10 días para otros tres. Si bien la infracción en la que incurrieron es la de “abandono de lugar de trabajo” y ésta contempla el despido del trabajador, se tomó la decisión desde el Ejecutivo de no dejar sin su fuente laboral a ningún empleado. Además, en los haberes de abril se les descontará los días no trabajados, que son más de diez.
Ocurre que, de fondo, aparece el tema de la ilegitimidad legal del gremio que realizaba el reclamo. Éste se formó hace un par de años y desde entonces lo único que habían presentado como testimonio de su inscripción a nivel nacional era un certificado de adhesión a la Confederación de Empleados Municipales de Argentina. Y nada más. Esto tornó en completamente ilegal la protesta.
Daños en la autovía
Otra cuestión que deberá resolver el Municipio tiene que ver con los daños que la quema de cubiertas produjo en 5 o 6 puntos de la Autovía 14, cuando durante el reclamo municipal se quemaron cubiertas sobre la nueva calzada y el retorno –nuevo- , en el sector de la ruta cercano al parque termal local.
De acuerdo a lo expresado por el Ingeniero Carlos Galeana (inspector de la obra en esta zona de la provincia y sur de Corrientes) a DIARIO JUNIO, “la empresa (la UTE Decavial-Esuco) hizo una constatación de los daños con escribano, la que se elevó al Municipio para que determine las responsabilidades y sancione a los autores de las quemas”. El profesional descartó que “por el momento” se realice una denuncia judicial, aunque aclaró que “los arreglos los hará la empresa, pero calculo que alguien se va a tener que hacer cargo del costo que implicará la reparación. Algún responsable tendrá que haber. Es un daño a un bien público”. También se eleva un informe a Vialidad Nacional.
Galeana señaló que el daño se produjo a causa del largo tiempo de exposición de la capa asfáltica a las altas temperaturas alcanzadas por la quema de cubiertas, lo que genera un debilitamiento de la misma y puede producir fisuras. Son unos seis puntos los que sufrieron deterioros, cada uno de la superficie o tamaño de la o las cubiertas que tiraban o apilaban para incendiar.