En las últimas causas judiciales que se ventilaron en la Justicia federal, se supo que una de las bandas que mueve la droga en Paraná llegaría a traficar cerca de 300.000 pesos por mes. En el marco de la lucha que lleva la Justicia y las fuerzas de seguridad contra estas organizaciones delictivas, se supo que desde la Policía de Entre Ríos se están instruyendo sumarios administrativos que podrían derivar en una denuncia penal contra dos funcionarios que estaban al frente de la División de Inteligencia de la Dirección de Toxicología. A los comisarios se los acusa de colaborar específicamente con una banda narco de Paraná, para lo cual habrían cobrado 75.000 pesos en efectivo.
El 21 de agosto se inició un sumario administrativo a los comisarios principales Roque Larrosa, quien era el jefe de la División Inteligencia de la Dirección de Toxicología, y al segundo jefe, Aníbal Catena. El sumario, que es llevado adelante por los responsables de la Dirección de Asuntos Internos, derivó por el momento en el desplazamiento de los dos funcionarios. Uno fue trasladado a cumplir tareas en la Jefatura de Policía de Rosario del Tala, en tanto que Catena se encuentra en la actualidad como coordinador de la División de Operaciones de la Jefatura de Policía de Paraná.
Acusaciones internas
El sumario que lleva adelante la Dirección de Asuntos Internos contra Larrosa y Catena se sustancia por actitudes sospechosas que iniciaron la investigación.
Tales indicios llegaron a la fuerza por datos aportados por policías que trabajan en la propia Dirección de Toxicología y que habrían dejado mal parados a los acusados.
Con esta información se ordenó desde la plana mayor de la Policía entrerriana una profunda investigación para que se aclaren los cuestionamientos hacia los dos uniformados sospechados.
Se hizo saber que tal están las cosas, este sumario podría derivar en una denuncia penal para que se determine si hubo algún tipo de actitud irregular de los comisarios.
Puntos oscuros
Específicamente el sumario alerta que Larrosa “en fecha 22 de octubre de 2009, desvió la atención del personal subalterno sobre un objetivo funcional en la represión de la actividad de comercialización de estupefacientes”.
Otro punto que se trata de establecer es que el mencionado funcionario habría “Tenido una conducción inapropiada con el manejo de información de calle, tomando decisiones erradas contra la lucha del narcotráfico”. También se le endilgó al jefe de Inteligencia de Toxicología “haber empleado elementos materiales y humanos de la Dirección en usufructo personal, concretamente, al ordenarla la búsqueda de bebidas alcohólicas desde un local bailable hasta su casa particular”.
El sumario administrativo alerta que el comisario principal “recibió 75.000 pesos por parte de un famoso narcotraficante, en forma ilegítima para desviar la investigación sobre el sospechoso”.
A Catena se lo sumarió porque “se le endilgó que en función de ser segundo del área de Inteligencia, habría tenido conocimiento en oportunidad de transportar en su automóvil a Larrosa al momento de recibir dinero de narcotraficantes”.
“Nada que ver”
El abogado defensor de Catena en el sumario administrativo, Marcos Rodríguez Allende, confirmó el tenor de las denuncias contra Larrosa y Catena.
En este sentido, el letrado explicó: “En mi carácter de defensor del señor Catena, estamos trabajando en su descargo ante la propia Policía. Sabemos que la investigación surge a partir de las mismas probanzas testimoniales recabadas por parte del personal perteneciente a la Dirección de Toxicología, en donde se compromete seriamente la conducta endilgada a Larrosa, quien prestó por 14 años servicios a cargo de la División Inteligencia”.
“En el sumario se indica que habría varios testigos que reflejan el supuesto pago o coima por parte de un narcotraficante que era investigado por la Policía, al propio Larrosa”, reseñó el abogado del restante policía acusado.
Con respecto a la situación de Catena, Rodríguez Allende enfatizó: “Sólo se lo responsabiliza por haber trasladado a Larrosa en su auto particular para un supuesto pago que se le habría efectuado a Larrosa”.
“Esto está descartado de plano, porque no hay ningún elemento probatorio que asevere esta cuestión, y es evidente que la situación de Catena nada tiene que ver con quien tenía la titularidad de la División Inteligencia”, entendió el abogado, para asegurar que en la acción que se dispondrá en el sumario quedará establecida la inocencia del oficial, que fue afectado por todos estos comentarios.
Cruce de versiones
La Dirección de Toxicología realizó en 2009 una importante tarea investigativa que terminó provocando la detención de Elvio Caudana, familiares del acusado, el secuestro de droga, dinero por cerca de 100.000 pesos, un lingote de oro y elementos que pondrían en serio riesgo la organización delictiva dedicada a la venta de estupefacientes a gran nivel.
Dentro de la Policía se entendió que este trabajo fue intenso y efectivo, pero que podría haber determinado que algunos uniformados de Toxicología hayan desviado la investigación para sacar del mercado a una determinada banda de delincuentes ligada con el mundo narco en beneficio de la restante.
Este rumor tuvo tanta fuerza que se inició una información sumaria que a criterio de Rodríguez Allende “podría provocar que una de las personas mencionadas en las denuncias pueda llegar a ser investigada en una causa penal en la Justicia federal”.
Por estos días en el Tribunal Oral Federal está siendo juzgado un grupo de personas de Paraná acusadas de comercializar estupefacientes. La semana pasada la fiscal Marina Pajares reclamó penas efectivas, pero inferiores a los tres años. En el sumario policial no se descartaría que alguno de los policías acusados sea colaborador de uno de los imputados en el juicio.
Endebles pruebas
El abogado defensor de Larrosa, es el constitucionalista Marciano Martínez quien al ser consultado explicó: “El sumario iniciado al comisario tiene pruebas muy endebles que no deberían comprometer a mi defendido”.
“Larrosa está siendo sumariado internamente y no creo que la cuestión pase a mayores porque no hay nada contundente para sostener una acusación seria”, indicó Martínez, para destacar: “A Larrosa se lo trasladó a Rosario del Tala, se lo alejó de su familia y ahora se está avanzando en el sumario, que no arrojó ninguna novedad de importancia. Esta investigación debería comprobar la inocencia de Larrosa”.
Fuente: Diario Uno
