En la audiencia de elevación a juicio, realizada el pasado 25de marzo, la fiscalía, a cargo de Pablo Castillo mantuvo la imputación conforme se había originado la detención de ambos acusados, como homicidio calificado para ambos, por alevosía, especificando que el código prevé una pena de prisión perpetua para este delito; y presentó 43 testigos para el debate.
La defensa de Zapata, a cargo del defensor de pobres y menores Ives Bastian, hizo reserva de plantar inconstitucionalidad en el juicio, acerca de la acusación de la fiscalía para su defendida, entendiendo que por ser su acción omisiva, es decir que cuadra dentro de las participaciones por omisión, no puede ser calificada con la figura de homicidio calificado, agravado por alevosía y ensañamiento: “el código prevé otras figuras para esa condición” dijo el defensor.
Después, Bastian tambien presentó prueba, en este caso además de los informes periciales, una lista de 7 testigos, muchos de ellos familiares de la imputada.
La defensa de Álvarez, representada por el defensor de pobres Pablo Garrera, también presentó una abundante prueba objetiva sobre la situación de salud de su defendido, que -puede esperance-, sea utilizada para argumentar morigeraciones en la pena; y una carta que en teoría habría escrito uno de los hijos del imputado. Que es además testigo clave del hecho mediante cámara Gesell. El defensor planteó además que la letra fuera reconocida por el menor en entrevista con un psicólogo.
Nota relacionada: Entrevista a enrique Stolla
http://www.diariojunio.com.ar/noticias.php?ed=1&di=0&no=53701