La suma de estas situaciones produce un colapso en el sistema cloacal casi permanente, difícil de superar en lo inmediato. Estos problemas, en la mayoría de los casos, se deben a:
– Mal uso de las conexiones domiciliarias: gran parte de los usuarios del servicio de cloacas lo utilizan para arrojar basura. Esto puede observarse diariamente en las tareas de limpieza de la red, donde se encuentra una cantidad significativa de residuos de todo tipo; productos plásticos, telas, metales, piedras, folletería comercial, ladrillos, etc.
– Interferencia de desagües pluviales domiciliarios en la red cloacal: estas conexiones irregulares de los desagües pluviales a la red cloacal provocan colapsos en los días de lluvias; derramándose sobre las calles y casas de los vecinos los excedentes de esta mezcla de desechos cloacales y agua de lluvia. Esta situación vuelve a la normalidad cuando se estabilizan los caudales de proyecto en la red cloacal.
– Atraso en el mantenimiento de limpieza de la red cloacal, bocas de registro y de colectores, por parte del Ente, debido a la falta de planes efectivos de inversión.