Debido al anuncio proveniente del Ente descentralizado de Obras Sanitaras (EDOS) que consiste en la reparación de un caño maestro y para lo que debieron paralizar la planta potabilizadora de agua desde las 4 am y hasta la 18, Di Lello remarcó que la decisión de suspender las clases para los chicos está justificada en razón de que hay colegios que no tienen tanques los suficientemente grandes ni reservorios de agua suficientes para abastecer a colegios que, en algunos casos, tienen hasta 1000 alumnos. “Yo tomé la decisión por los colegios públicos porque no tengo injerencia en los privados, pero lo trabajamos en forma conjunta y cada escuela tomó su resolución respecto a la cantidad de agua que saben que tienen almacenada”, explicó. “Hay colegios privados con dos, tres y algunos hasta 5 tanques, pero también hay otros privados como el de la Gruta de Lourdes, que tienen un solo tanque y no alcanza para toda la jornada”, aclaró. “A esta hora de la mañana ya hay varios colegios que no tienen más agua”
En ese contexto, la funcionaria remarcó que “no se trató de una decisión caprichosa” sino de la necesidad de actuar “ante la faltante de un recurso primordial” y en resguardo de integridad del estudiante. “Tampoco puedo ponerme a esperar a mitad de la mañana a que manden un camión cisterna, agradezco la buena voluntad de los bomberos y de la gente del Edos, pero no sabemos en qué condiciones llega el agua ni ponerme a enviar a cada establecimiento cuando me avisen que se les acabó. Yo no puedo especular con recursos primordiales, tengo que dar agua de calidad y para eso necesito planificar con tiempo la situación. Esa es mi manera de trabajar”, afirmó. “Y todo esto está en un marco normativo y legal y mientras esté en este lugar y cumpliendo la función que me pidió el gobernador, Gustavo Bordet, lo haré tomando decisiones serias y planificadas”, concluyó.
