Adriana de la Cruz de Zabal dijo que a su criterio “se perdió la oportunidad histórica (en el régimen del trabajo) para poder incluir mejoras sustantivas que hubiesen hecho a la calidad de vida de los trabajadores”. La Convencional puso de ejemplo entre los temas que no fueron incluidos por la mayoría justicialista el referido a los conceptos no remunerativos que se están pagando, defendiendo que la postura unificada de la oposición era que esos conceptos fueran remunerativos a partir de la sanción de la Constitución y retroactivos, en forma paulatina, a los efectos que todos los trabajadores se vieran beneficiados.
“Pretendíamos que se creara un organismo autónomo que se encargara de las instancias de mediación, pero tampoco logramos convencer a los Convencionales oficialistas que justificaron su postura en ayudar en el crecimiento y jerarquizarción de la Dirección Provincial del Trabajo. Con este modelo el Estado es patrón y parte lo que no es ideal para una instancia de mediación”, afirmó.
La Profesora Zabal manifestó que la oposición logró un dictamen unificado apuntando a la creación del Consejo de la Paritaria Estatal, “un verdaderos instituto de la democracia laboral”, el que “en algún momento tuvimos en la provincia y que después no los tuvimos más y que es absolutamente necesarios para poder sentar a las partes en igualdad de condiciones”, opinó. Seguidamente se quejó que tampoco fuera incluido el concepto de trabajo decente, entendiéndose esto por una remuneración y un lugar acorde para que todo trabajador pueda desenvolver sus funciones con seguridad laboral. “Planteamos una contención integral”, aseguró la Convencional oriunda de Basavilbaso que calificó de “inexplicable” la postura del oficialismo, cuyos dirigentes históricamente alzaron la bandera de los trabajadores, por lo que consideró una actitud “incoherente”, que le costó la reprobación de quienes completaron las gradas e hicieron sentir su descontento. “Se sentía el dolor de los trabajadores que habían puesto en esa sesión de la Convención sus esperanzas de lograr instrumentos que los ayudaran, y que además venían del corazón mismo de los trabajadores el estado”, aseguró finalmente.
