“Estos carros se suman a dos programas: Erradicación de vehículos a Tracción A Sangre Animal (TAS) y de “Movilidad Sustentable”. Tenemos dos tipos de usuarios, los que andan en carro tirados a caballo que quieren cambiarlo por un bicicarro y, en particular, los recolectores que andan con carros manuales, tipo carretillas, que recorren las calles tirando del mismo. Los primeros cuatro bicicarros que llegaron nos sirven para evaluar su funcionalidad y ver que repercusión tienen entre los posibles destinatarios”, conto el coordinador general de la Unidad de Desarrollo Ambiental (UDAAPA), Martín Armanazqui.
Sobre estos nuevos vehículos con destino a la recuperación de materiales reciclables livianos, Armanazqui detalló que “son unidades de una sola estructura; es decir que la caja no va enganchada. Son bastante livianos, tienen buen radio de giro, tienen freno a tambor en las tres ruedas, freno de mano, espejos, paragolpes, un asiento regulable con respaldo lo que permite una postura de manejo adaptable, cómoda, que lo hace más fácil y práctico. Tienen capacidad de cargar un bolsón de un metro cúbico de cartón y plástico. Están destinados para la recolección de materiales reciclables de poco peso”.
Respecto a los motocarros, Armanazqui explicó que todavía se están esperando la entrega de más unidades de parte de Nación: “Nosotros solicitamos 100 unidades. Nación entregó 31 y faltan 69 todavía. Por nuestra parte, el municipio adquirió otros 10 con recursos propios. Estamos esperando que Nación reactive el programa y haga entrega de los motocarros pendientes. Tenía que venir personal de Desarrollo Social de la Nación para verificar que los carros hubieran sido entregados y cómo marchaba el programa de erradicación de tracción a sangre animal, pero por cuestiones de la pandemia se ha visto demorado”.
Según el titular de UDAAPA, los 20 bicicarros adquiridos fueron licitados por el municipio y tienen un costo total de 4 millones de pesos.
El funcionario señaló que “la compra de los bicicarros no viene a reemplazar la adquisición de los motocarros: “Son distintas movilidades y una es complementaria de la otra en la idea de suplantar la tracción animal, promover la separación de residuos y el posterior reciclado y empezar a darle a la ciudad una impronta de movilidad sustentable.”
El funcionario contó que por ahora el programa de Erradicación TAS está avanzado en un 50 por ciento y afirmó que lo implementado hasta el momento viene dando buenos resultados tanto para las personas incluidas en el programa como para la ciudad ya que se ha podido disminuir de esta manera la proliferación de micro basurales.
“En su momento, antes de la pandemia, relevamos y atendimos más de 2500 caballos y registramos 500 carreros. De esa cantidad detectamos que casi 100 carros eran los que entraban a la zona centro de la ciudad. Entonces lo que hicimos fue diseñar el proyecto y gestionar los fondos para erradicar los carros de tracción a sangre de la zona céntrica. La solución a este tema es progresiva. Hay otros 400 registrados que pertenecen a personas que hacen sus labores fuera del radio comprendido en esta etapa de sustitución. Esos van a entrar en la segunda etapa en la que se buscará apuntar también a la reconversión laboral de los carreros a través de la capacitación de distintos oficios y el acompañamiento estatal. Por eso es que el programa comprende varias etapas”, detalló el coordinador general de la unidad de Desarrollo Ambiental.