Fue una de las primeras iniciativas impulsadas por Mattiauda a pocos meses de haber asumido su banca en diciembre de 2015 y avanzó en la Cámara Alta con media sanción en junio de 2016, aunque recién en septiembre de este año fue convertido en Ley por Diputados.
“Me causa una enorme alegría la promulgación de la Ley porque implica brindar protección a un edificio y predio históricos, salvaguardándolos de cualquier posibilidad de remate o loteo futuro”, expresó el representante del departamento Gualeguaychú.
Remarcó que “se cumplió con el objetivo propuesto” cuando presentó el proyecto porque la Ley “significa una protección para el patrimonio de la entidad” propietaria del Hipódromo de Gualeguaychú, que es el Jockey Club.
Con la iniciativa, Mattiauda buscó evitar que los problemas económicos y el acrecentamiento de pasivos de la institución sean determinantes para la desaparición del histórico predio que fue inaugurado el 9 de julio del año 1900 y cuyas primeras construcciones fueron realizadas en un marcado estilo inglés.
“Las edificaciones que componen el Hipódromo se encuentran con su estructura intacta e integran el patrimonio arquitectónico de la ciudad y fueron declarados inalterables por una ordenanza municipal, por lo que faltaba el paso más importante para evitar que pueda ser rematado”, explicó.
La norma establece además que el Ejecutivo Provincial, a través del organismo que corresponda, adoptará las medidas necesarias para la promoción y difusión del valor histórico, arquitectónico y cultural del predio y toda edificación que contenga.
“Agradezco el acompañamiento del proyecto primero por parte de mis pares en la Cámara Alta hace tres años, y ahora de los diputados que entendieron la importancia de la iniciativa que protege el patrimonio de una histórica institución como el Jockey Club, que posee uno de los Hipódromos más importantes de la región y que con la actividad turfística genera más de 200 puestos de trabajo, entre directos e indirectos”, precisó Mattiauda.
