“Son atribuciones de los actuales concejales darle tratamiento e incluso aprobación; si gana el radicalismo no habrá problema porque nosotros ya tenemos definido un organigrama y seguro lo modificaremos”, concluyó el candidato a concejal.
En la sesión del 8 de septiembre, un proyecto enviado por el Ejecutivo pasó a la comisión de Asuntos Generales para el tratamiento por parte de los ediles. El proyecto establece cambios en el organigrama municipal pasando de una secretaría (Hacienda y Planificación General) a tres: Planificación, Infraestructura, Obras y Servicios Públicos (tendrá a cargo las direcciones de Servicios y Obras Públicas), Gobierno, Hacienda y Producción (tendrá las direcciones de Gobierno y Hacienda, Producción y Desarrollo Urbano) y Gestión y Políticas Sociales (contará con las direcciones de Desarrollo Social, Integración de Personas con N. E. Niñez y Mujer, Turismo, Cultura, Deportes y la Coordinación de la Atención de Salud Municipal). En tanto, la Dirección de Cooperación y Defensa Civil seguirá dependiendo directamente del intendente.
Al preguntarle sobre el sentido del proyecto enviado por el actual intendente, Dal Molin sostuvo: “podría obedecer a dos cuestiones; una que esté consensuado con sus candidatos, en una posible continuidad de la gestión, argumento que a mi criterio no tiene asidero, puesto que de nada sirve poner en la arena política un tema de esta naturaleza; y otra es que se desnude la pelea interna por espacios de poder como se vislumbra. Esto último sentido sería peligroso porque estaría pretendiendo condicionar”.
Con relación al alcance del proyecto afirmó que tiene muchas cuestiones que deben ser observadas, destacando que no se adapta mucho al nuevo rol de los municipios; no están para nada aclaradas las funciones del vice intendente, o por ejemplo lo que define el Artículo 16º de la Ley orgánica de los municipios: “Habrá un encargado y director responsable de la efectiva percepción de los tributos, derechos, multas y demás recursos municipio”. En la lectura del proyecto nada de esto se observa. Merece otro tipo de estudio, de análisis de fondo.
El radicalismo presentará los lineamientos del organigrama municipal en el marco de la campaña en vistas al 23 de octubre, adelantando que el mismo reflejará los objetivos establecidos por Zambón – Zapata en cuanto a transparencia, participación y claramente enfocada en el vecino.
Por último agregó: “que las organizaciones modernas se adaptan mejor si son descentralizadas, horizontales y en permanente contacto con el vecino; como también debemos crear los institutos de participación necesarios e imprescindibles para una gestión moderna”.
