“Tanto la presidenta como el ministro Aníbal Fernández mintieron. Les dijeron a los argentinos que el fútbol no les iba a costar un centavo y que las ganancias producidas iban a ser para financiar el deporte olímpico, resulta ahora que ya se comprometieron más de 700 millones para el fútbol que pagaremos todos mientras sólo se recuperó menos del 1% del contrato. Pero, además, le quitan dinero a los usuarios de celular para promover el deporte olímpico”.
Según datos informales, existiría un gasto de $30.000 por fecha, arrastrando una cifra cercana a $84 millones hasta ahora, lo que produce una diferencia de más de $26 millones con el monto que se debería haber recaudado, $126.3 millones.
Según estimaciones privadas y teniendo en cuenta las tarifas de publicidad, el gobierno estaría destinando más de $60 millones a estos fines. A lo anterior hay que agregar que el gobierno, maliciosamente, ha utilizado este instrumento para agredir a la oposición, ya sea a través de publicidad referida a la gratuidad del fútbol o la nueva ley de medios.
Cusinato aportó más cifras del despilfarro. “Para este año había comprometido recursos que superan ampliamente los 600 millones originales de la firma con la AFA, a los que deben sumarse otros 57 millones más en concepto de publicidad oficial, 62.521.000 por transmisiones satelitales que fueron adjudicadas a la empresa La Corte y ocho millones en concepto de contratación de móviles con 8 cámaras (este servicio se pagará un 257% más que lo que pagaba TyC), es decir más 727 millones por lo que deberán rendir cuentas los funcionarios responsables de contratar esos servicios”, denunció.
Cusinato recordó que la empresa La Corte es propiedad de los hermanos Pablo y Daniel Monzoncillo, histórica contratista del Estado y con fuerte vinculación con el kirchnerismo. La productora ingresó al mundo K de la mano del ex vocero presidencial Miguel Núñez. Comenzó transmitiendo los recitales en la Casa Rosada y luego extendió su actividad hasta entrar, junto con el gobierno, al negocio del fútbol.
En relación a la contratación directa de los móviles para la transmisión, la empresa VTS ha presentado su oferta que supera en casi un millón de pesos a otra empresa. Un móvil con 8 cámaras antes del contrato con el AFA- estado costaba $19.160, ahora cuesta $88.050.
“Todo esto constituye una verdadera malversación de los recursos públicos y de los usuarios”, consideró el vicepresidente de la comisión de Comunicación de la Cámara de Diputados.
