El actual contrato de prestación de servicios sanatoriales caducó el 31 de diciembre, luego de varias prórrogas que fueron dándose desde el vencimiento original del acuerdo, ocurrido el 31 de octubre.
Los representantes de clínicas y sanatorios reclaman una mejora en el valor del servicio y la regularización de quitas que se han producido entre el 2006 y el año pasado por un valor cercano a los 6,5 millones de pesos.
Luego de los encuentros realizados ayer con el ministro de Salud, Ángel Giano, y a menos de seis horas del límite para que se interrumpa el servicio, el Directorio tendrá que resolver una nueva oferta para la ACLER que destrabe la situación que se ha venido complicando desde hace unos meses y deje satisfechas las pretensiones de la corporación empresaria.
