En su cuarto día de actividad, el lunes, recorrieron unos 15 kilómetros y ahora los cerca de cinco mil integrantes del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) se unirán para exigir la libertad del ex jefe de Estado.
Desde las localidades de Formosa y Luziania, en el Estado de Goiás, y Engenho das Lages, en el Distrito Federal, partieron los manifestantes el sábado pasado para recorrer cerca de 50 kilómetros hasta la capital.
"Esa es una causa mía y de todo el pueblo brasileño (…). El mundo entero sabe que la prisión de Lula es una gran mentira", denunció la jubilada María Antonia Dalbelo, citada por Brasil de Fato.
Además, el MST quiso plasmar en la calle el rechazo de la ciudadanía a las reformas económicas lideradas por el mandatario no electo Michel Temer, así como llamar la atención de la población hacia la crisis económica que padece el país.
En la víspera, el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, participó en la Marcha Nacional Lula Libre "en solidaridad del pueblo de Brasil y por la liberación de Lula, quien es un preso político", dijo.
