Cruce de versiones entre Piaggio y la policía por la intervención de la fuerza en la marcha de comerciantes

Desde su aislamiento preventivo, luego que el jefe de Policía de Gualeguaychú, Cristian Hormachea, diera positivo por Covid-19, el subjefe de la policía de esa ciudad, Yari Sosa, habló con DIARIOJUNIO y confirmó que efectivamente fue el propio intendente Martín Piaggio quién lo llamó para decirle que la marcha de comerciantes estaba violando el decreto y que la autoridad de aplicación debía intervenir.

“Me llamó a mi teléfono y me anotició que se estaba dando una clara violación al decreto y que nosotros éramos la autoridad de aplicación. Constatamos la violación al decreto e intentamos comunicarnos con las autoridades judiciales que no nos atendieron –primeramente- porque estaban trabajando con las líneas telefónicas y estaban ocupados. Entonces mandamos un oficial al lugar y nos dijeron que procedamos y que si había una violación al decreto o un delito, que posteriormente lo informemos. Eso fue lo que se hizo. Desde la autoridad policial provincial también se comunicaron y nos ordenaron que vayamos al lugar y hagamos una identificación de las personas en la marcha. Encontramos una situación en que la gente se manejó bien, con distanciamiento con medidas sanitarias, con respeto a la autoridad. Para evitar males mayores procedimos rápidamente para desocupar a las personas que se encontraban en la marcha. Lo relevado lo elevamos al juez federal, Hernán Viri”, relató a DIARIOJUNIO, Yari Sosa.

El reclamo de los comerciantes se originó a raíz de la decisión del intendente de Gualeguaychú Martín Piaggio de retrotraer la situación de la ciudad a la Fase 1 del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) por el aumento sustancial de casos de coronavirus luego que la ciudad viviera un “veranillo” en que gran parte de la ciudadanía se relajó, lo que ocasionó el rebrote del virus, la elevación en la curva de contagios por Covid-19 y que se clasificara a la ciudad como zona de Contagio Comunitario.

La situación de Gualeguaychú, con sus camas hospitalarias la borde del colapso, el personal sanitario diezmado y lo hoteles repletos de personas aisladas a la espera de resultados, llevó al intendente de esa ciudad a decretar la vuelta a Fase 1, lo que implicó de nuevo el cierre de los locales comerciales.

El intendente Piaggio, de profesión médico, es un férreo defensor de la salud, pero los comerciantes le achacaron responsabilidades por no haber sido más inflexible en el control sobre aquellos ciudadanos que incumplían las medidas preventivas y acusaron que, con esta decisión, les estaban haciendo pagar el “pato de la boda” a quienes sí cumplieron con las normativas. Pero la soga se tensó aún más luego de que los representantes de los comerciantes llevaran un “Habeas Corpus” ante la justicia Federal bajo el argumento de la defensa de la libertad de comercio y de la circulación de personas. Piaggio también fue citado a concurrir a tribunales donde hizo declaraciones que fueron entendidas como un ninguneo a la problemática del sector: «Hubiera preferido invertir mi tiempo en otra cuestión porque lamentablemente no son mecanismos que se deben utilizar en este difícil momento», fueron algunas de las palabras expresadas por el jefe comunal que aumentaron el malestar de los comerciantes que decidieron llevar adelante una manifestación en protesta.

Dicha marcha fue interrumpida por la Policía de Gualeguaychú, lo que ocasionó un mayor repudio por parte de ese sector de la ciudadanía. Según la institución policial, intervinieron en la misma luego de que el propio intendente denunciara que se estaba incumpliendo con el decreto de ASPO.

Sin embargo, Martín Piaggio desmintió el hecho al declarar que “Yo no tengo competencia para ordenar, ni mandar a la Policía.»  Por lo que la institución policial quedó en el ojo de la tormenta.

El subjefe de policía de Gualeguaychú explicó que “Las denuncias se producen de manera telefónica de parte de cualquier vecino, en este caso se trataba del presidente municipal, y nosotros tenemos que ir a constatar. En caso que se verifiquen delitos comunes corresponde dar aviso a la fiscalía, y en caso de violaciones a las restricciones producto de la pandemia corresponde a la justicia Federal. Lo único que se hizo fue cumplir con las disposiciones”, explicó.

“Yo lo único que hago es decir la verdad. Evidenciar cómo fueron los hechos. Si bien los vecinos se manifestaban dentro de sus autos, tocando bocinazos y de manera pacífica, también es cierto que había una violación a las medidas dispuestas. Y yo tengo derecho al trabajo porque si no lo pierdo. Lamentablemente la pandemia provoca una fragmentación de la comunidad. Una división de los grupos y si no hay unión como sociedad y no logramos un entendimiento de parte de todos se da este resultado que es lamentable, pero en el que la institución policial no tiene nada que ver”, señaló el sub jefe de la policía de Gualeguaychú, Yari Sosa.

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