En ese sentido, la Presidenta consideró que “estamos ante un cambio de época y no en una época de cambio, que arrastra todo: comercio, economía, usos y costumbres”.
En referencia a los gremios, se refirió al caso particular de la provincia de Santa Cruz, donde “los sindicatos lograron aumentos que ahora no hay plata para pagarlos”, y criticó la “carrera alocada” de las demandas laborales “creyendo que el Estado es una vaca que no termina su leche”.
“Hay necesidad de poner sensatez en la demanda, y eso no quiere decir renunciar a los derechos. (Pero) los trabajadores ganaron más dinero estos años producto del modelo macroeconómico, no producto de una huelga más o menos”, subrayó, y pidió a gremialistas y empresarios “poner el hombro a un país que le ha dado mucho a todos”.
La Presidenta encabezó esta noche un acto en el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada, en el que anunció una segunda etapa de los créditos del Bicentenario de $8 mil millones.
“Necesitamos seguir manteniendo el poder adquisitivo de los trabajadores. Es necesario articular público y privado, trabajo y capital hoy más que nunca, porque hoy más que nunca los empresarios y trabajadores necesitan de un mercado interno fuerte que nos resguarde del vendaval externo”, aseveró.
Cristina expresó su satisfacción por “el saldo comercial de casi 4 mil millones de dólares en el primer cuatrimestre de 2012”, y dijo que las exportaciones en abril descendieron “porque el mundo ha caído y eso afecta”.
“Es necesario que nos sentemos con las grandes empresas, las pequeñas y las medias, para poder sostener este crecimiento que lo vamos a sostener contra viento y marea, y que nos presenten sus planes de inversiones”, señaló la jefa del Estado, para “seguir manteniendo las promociones industriales y subsidios; es necesario sostener esa inversión porque viene un mundo muy difícil”.
Además, Cristina anunció que las empresas que no superen exportaciones por dos millones de dólares (11.100 de 12.800) “volverán a la vieja normativa” de liquidación de divisas.
La Presidenta destacó ante los militantes que deben agregar “democrático” a “nacional y popular”, y recordó los primeros tiempos del peronismo y su relación con la libertad de expresión, citando un diálogo ficticio en la película “Eva Perón”, protagonizada por Esther Goris.
En relación a ello, opinó: “Nunca en toda la historia hubo un gobierno tan denostado, criticado, injuriado como éste, y aquí estamos felices y contentos haciendo cosas. Lo importante no es el juicio de tres o cuatro que escriben o hablan por TV, sino el juicio de mi pueblo”, concluyó.
Acompañada por el vicepresidente Amado Boudou y miembros del Gabinete, Cristina comenzó el acto a las 19 y previo a su discurso dialogó por teleconferencia con la localidad de Quequén, de Ushuaia y Tafí Viejo.