Tal como informara este medio, la investigación que lleva adelante el fiscal Penayo Amaya es sobre el robo de una computadora valuada en 10 mil dólares, propiedad de Pablo Yelín, y que se usa para hacer “minería de criptomoneda». El aparato fue sustraído el pasado 22 de mayo de una propiedad ubicada en Avenida San Lorenzo (Este) al 1200 que alquilaban el denunciante, Francisco Bruno y otros tres socios.
Según los datos aportados por fuentes judiciales, se trataba de una sociedad de amigos que habían sumado cinco de estas máquinas para realizar lo que se conoce como “minería de criptomonedas”. Sin embargo, la sociedad habría finalizado y unas semanas antes del robo, todos los socios, excepto Yelín, habían retirado sus computadoras del lugar. Lo que dio a suponer que se trataba de un robo comprendido dentro del círculo interno porque que a esa información la conocían muy pocas personas.
Por este hecho, el miércoles 21 de julio se realizaron dos allanamientos: Uno de ellos en una vivienda particular sobre calle 6 de Caballería y el otro en el tradicional Bar Ideal de calle Urquiza y 1° de Mayo, propiedad de Francisco Bruno, quien resultó imputado de ser el autor material del delito.
Tras el avance de la investigación, el fiscal Penayo Amaya confirmó hoy en DIARIOJUNIO que el empresario gastronómico se presentó a indagatoria con su abogado, José Romero, y reconoció su participación en en el hecho. En cuanto al autor material del robo, el empleado municipal Hernán Boraglio, su abogado defensor, Juan José Buteknica, afirmó en DIARIOJUNIO que apenas inició la causa se presentó con su defendido y entregaron los objetos que habían sido sustraídos. «Firmamos un Abreviado y terminó la causa para el», detalló.
De esta manera, los imputados aguardan ahora que el Juez Mario Figueroa. ratifique los acuerdos y dicte condena.
