Almada detalló qué pasó en los encuentros que mantuvieron con el intendente y funcionarios del gobierno, respecto a la ordenanza promulgada el jueves 15 de diciembre que prohíbe la actividad de cuidacoches, malabaristas callejeros y prestadores informales de servicios de limpieza a vehículos en la vía pública.
«Varios compañeros que formamos parte de la asamblea fuimos recibidos el jueves a la mañana por Enrique Cresto, Fernando Barboza y Gabriel Belderrain en una mesa de diálogo, en la que el intendente nos comúnico la intención de llevar adelante una Resolución o un decreto por parte del ejecutivo para suspender la ordenanza por 4 meses», contó la integrante.
«Después de asesorarnos legalmente y discutir en Asamblea, entendimos que esa opción no era viable porque no iba a dejar sin promulgar la ordenza que entraría en vigencia el lunes, con lo cual, aquellos compañeros que son Trabajadores de espacios públicos podrían ser echados por la policía o quien fuera cuando vayan a ejercer», explicó.
«Esa misma tarde volvimos a ser convocados por el ejecutivo en la Plaza y nos recibieron Aldo Álvarez, Fernando Barboza y Gabriel Belderrain. Ya Cresto no estaba», advirtió. «Ahi nos comunicaron como última noticia que el Departamento Jurídico estaba trabajando en el veto de la ordenanza y que el Ejecutivo estaba evaluando los fundamentos para que vuelva al Concejo Deliberante. Nos convocaron para hoy viernes apartir de las 10, que iban a tener una respuesta final, pero no fuimos recibidos por el Ejecutivo ni por la gente de Cultura, y tampoco nos dieron una respuesta ni nada para saber en qué situación estábamos», reclamó.
«Por eso y como nosotros ya habíamos definido un plan de lucha, resolvimos que lo vamos a llevar a cabo la semana que viene y nuevamente nos vamos a convocar en la Plaza, el próximo viernes 30 a las 18, para visibilizar el conflicto», advirtió Almada, y agregó: «Por otro lado vamos a presentar un recurso de amparo con trabajadores de la vía pública, para de alguna manera poner de manifiesto que se están violando nuestos derechos y los derechos humanos en general, para enfrentar y frenar este tipo de normas fascistas y de derecha, que van en contra de trabajadores que se ganan el mango haciendo malabares, música, limpiando vidrios o cuidando coches», concluyó.
