En los últimos seis días llovieron más de 120 milímetros, lo que generó la casi inmediata subida del río Gualeguaychú. Si a ello se le suma la creciente incapacidad del suelo para absorber el agua, producto de la deforestación indiscriminada y las kilométricas plantaciones de soja, y la apertura de las compuertas de la represa Salto Grande, en esa ciudad ven con un cuadro de situación preocupante.
“Tenemos un incremento en la erogación de la represa, que llegó a los 14 mil mililitros por segundo, y eso hizo que el puerto de Concordia llegara a los 10.5 metros, aunque ahora empezó a bajar lentamente”, explicó Daniel Hernández desde defensa Civil, al tiempo que catalogó de “maniobras necesarias” a la apertura de compuertas por la cantidad de agua que llegó desde el norte e hizo subir el lago de Salto Grande a los 35.5 metros.
En Gualeguaychú se empiezan a sentir las consecuencias de este fenómeno. Anoche el río había llegado a los 2.94 metros creciendo y “se esperan vientos del sudeste para los próximos días”, adelantó Hernández.
“Si bien no se espera llegar a una situación de evacuación en Gualeguaychú, sí continuará subiendo el río y que algunos sectores del Parque Unzué se vean anegados”, agregó.
Asimismo, el funcionario remarcó el carácter de “extraordinario” de la cantidad de agua caída, que en algunas zonas sobrepasó los 300 milímetros en tres días. “Si a la tremenda cantidad de agua caída se le suma que no hay nada que la retenga, ya que los suelos no tienen capacidad de absorción, producto de la tala de árboles y las plantaciones de soja”, enfatizó.
Por último, Henández indicó, con respecto al pronóstico, que “será menos crítico a lo que esperábamos hace algunos días” y adelantó que, si bien hay que ser precavido, todos los frentes de tormenta ya salieron de la provincia de Entre Ríos, por lo que el clima tenderá a ir mejorando.
