Según precisaron a DIARIO JUNIO, los trabajadores vienen reclamando desde hace varios días que se mejoren algunas condiciones laborales en el moderno complejo montado por la firma “Blue Berries” en la localidad de Colonia Ayuí.
La misma que fuera visitada por el gobernador Jorge Busti el pasado 18 de junio, considerada uno de los establecimientos modelos, de una producción que esta llamada a solucionar el problema de la desocupación en la región. En aquella oportunidad el gobernador recorría la plantación y manifestaba que desde el gobierno provincial “estamos apoyando, junto con el Ministerio de Trabajo, a todos aquellos que se dediquen al arándano”. Según afirmaba entonces el gobernador, “todavía no se valora la cantidad de gente que ya esta trabajando en el departamento Concordia y lo que va a significar para la ciudad dentro de unos años”.
Pero la realidad demuestra que algunos productores arandaneros, no se diferenciarían de otros empresarios rurales del ámbito citricola y forestal, donde la mano de obra es siempre la variante elegida para acotar gastos.
Así lo denuncian los cosechadores de la firma “Blue Berries” de Colonia Ayuí, quienes en la mañana de ayer llevaron adelante una “sentada” frente al portón del establecimiento.
Graciela Rivarola es una de las mujeres que llevó la voz de los trabajadores hasta el capataz del establecimiento, lo que le valió que fuera informalmente despedida de su trabajo, pero que hasta el momento no recibió ninguna notificación concreta.
Despedida sin aviso
Graciela narró a DIARIO JUNIO que no recibió ninguna notificación “y justamente vengo del correo donde le mando un telegrama a la empresa, pidiéndole que aclare mi situación laboral”, narrando que su despedido de la empresa le fue comunicado por el capataz y una delegación policial, que la invitó a marcharse de la plantación, conjuntamente con otro grupo de empleados. “Es importante que toda la opinión pública se entere en las condiciones que estamos trabajando. Tengo 7 hijos, salgo de mi casa a las 7 de la mañana y vuelvo a las 8 de la noche, por los menos merezco un poco de respeto”, reclamó.
Las causas que colmaron la paciencia de los trabajadores fueron, primeramente, un accidente sucedido hace mas de una semana, cuando el viejo colectivo en el que eran trasladados hasta la plantación, colisionó contra otro micro al quedarse sin frenos. Según los trabajadores ya habían hecho planteos sobre la precariedad con la que se movilizaba el transporte, pero no tuvieron eco de la patronal. Y en las últimas jornadas se agregó “el reclamo de quincenas atrasadas y condiciones dignas de trabajo”.
Rivarola destacó que “lo paradójico es que lo que estamos cosechando se exporta al primer mundo EE UU y Europa, mientras que la quincena pasada no pagaron el feriado del 12 de octubre y a la fecha que estamos nuestro reclamo no ha sido reconocido”
Según puntualizó este trabajadora, el encargado de la plantación, a quien identificó como Pablo Dalzotto, les habría remarcado “que los que querían trabajar tenían que presentarse mañana (por hoy martes) a las 7 de la mañana, y los que solo querían cobrar, que vayan al mediodía”.
El gremio bien gracias
DIARIO JUNIO consultó si habían recibido el respaldo de gremial, a lo que Graciela respondió que “nos representa UATRE, y hoy fueron pero para dar una charla. Pero lo que nosotros necesitamos es que si nos representan, se acerquen hasta donde esta la gente”.
Subrayando que sindicalmente nunca se sintieron acompañadas, “porque yo he estado trabajando cuando hacen las visitas y no llegan a los cuadros donde están los trabajadores”.
Para la jornada de hoy martes, los trabajadores tienen previsto volver a protestar en la puerta de ingreso al establecimiento, asegurando que “la gente quiere cobrar pero también quiere trabajar, en condiciones dignas”, afirmando que por el hecho de haber sido despedida, sus compañeros también reclamaran por su incorporación, y la de las personas que fueron despedidas por pedir condiciones dignas de trabajo. Agregando por último que “si no estar desocupada es que te traten como un animal, prefiero seguir como desocupada”.