“Todas las distribuidoras del país empezaron a hacer cortes. Algunas ya empezaron. Como en Córdoba, Santa Fe y la provincia de Buenos Aires. Son cortes selectivos. Se determina a priori sectores del ciudad donde se infiere que la capacidad de pago está en condiciones de hacer frente a los compromisos”, indicó Spinelli. Además recalcó que muchos socios que pagan con mucho esfuerzo les reclaman el no hacer nada por poner al día a quienes no abonan sus facturas “El socio tiene razón”, acotó.
Spinelli recordó que la recaudación de la CEC, a parir de abril, cayó como cayó en todos lados la actividad económica. “Nosotros, hasta marzo, con la recaudación no nos sobraba nada pero teníamos todo al día. Éramos de las pocas distribuidoras cooperativas que estaban al día con Cammesa. Después más nadie pudo estar al día. Al caer la recaudación y al tener tarifas congeladas no teníamos los recursos para hacer esas erogaciones. Pero no solo la Cooperativa de Concordia sino todo el sistema de distribución del país: las grandes distribuidoras, las distribuidoras del Estado, las distribuidoras privadas, las cooperativas. Con su más y sus menos, todos participaron de la misma problemática”, explicó.
“Nosotros advertimos que con aquel parate, entre abril y mayo, las ciudades eran ciudades desiertas. Uno se paraba en la puerta de la casa y veía pasar un auto y decíamos ‘¿Este porque sale a la calle?’, decíamos”, recordaba. “El país se había parado y las actividades esenciales eran muy poquitas”, remarcó. “Todo eso produjo que se interrumpiera la cadena de pagos de manera muy brusca y como cooperativa teníamos que tener algún tipo de respuesta”, añadió.
De inmediato, organizaron reuniones con diversas entidades intermedias como el CICS, Asodeco o la Asociación Hotelera Gastronómica. En el caso de hoteles y restaurantes, la facturación se redujo a $ 0.
Frente al panorama descripto, desde la CEC adoptaron varias medidas. Por un lado, dividieron al consumo por categorías. Las categorías 2 y 3 tienen un componente que se llaman potencia. “Es un contrato separado que se celebra a instancias de Cammesa para que puedan organizar el despacho de la energía a todo el país de manera sustentable. Es un monto fijo por contrato”, indicó.
Desde la CEC lo que hicieron fue permitir a los comercios, industrias y algunos clubes deportivos enrolados en esa categoría modificar provisoriamente el contrato de potencia. “De modo que el gasto fijo que ellos tienen se ve reducido hasta tanto vuelvan a la actividad, cosa que, de a poquito, lo van logrando. Cuando vuelven a la actividad vuelven a tener consumo y recuperan la potencia que responde a lo que se había contratado originalmente”, mencionó.
“Nosotros planteábamos que, aún a costa nuestra, acompañábamos el proceso e íbamos facilitar, llegado el momento, la recuperación de la actividad económica de la ciudad”, recalcó.
Paralelamente, a principios de abril, el gobierno nacional dictó un decreto que dispuso la prohibición de suspender los servicios de electricidad, gas e internet. Pero no alcanza a todo el universo de usuarios existente sino que abarca un 25 % aproximadamente. “El otro 70 o 75 % estábamos en condiciones, ante la falta de pago, de cortar el suministro”, indicó. “Nosotros resolvimos no cortarle a nadie y acompañar la crisis sanitaria que provocaba una crisis económica muy importante. Excepto casos puntuales de hurto de energía o algunas conexiones clandestinas muy groseras para la vida propia o de terceros por las malas condiciones en que se encontraban”, añadió.
Pasaron los meses y en diciembre pasado dispusieron que debían atender a los socios comunes como los kioscos o almacenes chicos o usuarios residenciales que sufrieron de igual modo la caída de la actividad o que se les pagaba la mitad del sueldo o nada porque estaba suspendido por la cuarentena. “Elaboramos un plan de pagos especial con quita de intereses que terminó el 31 de enero”, dijo.
El recorte de los intereses es del 100 % si se abona la deuda al contado y solo debe pagar el capital histórico. En cinco cuotas se le recorta el 80 % de los intereses. En ocho cuotas la reducción del interés disminuye y en 12 cuotas la rebaja de los punitorios solo alcanza al 20 %.
“Hemos difundido esto porque nos parecía que la CEC debía establecer un plan de recuperación de socios a través de diversas facilidades”, sostuvo. “Al mismo tiempo, no dejar de ver a aquel socio que, con mucho esfuerzo, no dejó de cumplir con el pago de la factura en tiempo y forma. A ese socio le hemos otorgado una pequeña reducción en las facturas respecto del consumo”, mencionó.
“Tuvo una buena acogida, mucha gente se ha acercado y las ultimas semanas, como ocurre casi siempre en todos los planes, hubo socios que decían que necesitaban más tiempo así que lo hemos prorrogado hasta el 1° de marzo a este plan de facilidades”, indicó.
“Estamos esperando las noticias acerca de si va a haber ajuste tarifario y todo parece indicar que sí. No sabemos si va a ser escalonado o va a ser para todo el mundo o segmentado. Pero nosotros nos apuramos con esto para que se pongan al día ahora”, indicó.