Jaroslavsky consideró que “el Estado necesita que todos los efectores de salud se encuentren en las mejores condiciones posibles a la hora de afrontar la atención de la población” y, en tal sentido, es que sostuvo que “la emergencia sanitaria provocada por la pandemia del Covid-19 obliga a extremar los lazos de asistencia que vinculen la actividad sanitaria pública y privada”.
Para la legisladora, “disminuir las cargas impositivas a las clínicas y sanatorios de la provincia que prestan servicios considerados indispensables en esta pandemia y que se encuentran gravados por alícuotas de Ingresos Brutos, puede ayudar a todo el sistema de salud privado a sostener la liquidez imprescindible para el abastecimiento de los insumos necesarios en esta emergencia”.