Es que, según los dichos del ministro, esta cárcel se quiso hacer en otros lugares de la provincia (como La Paz y Diamante) y, en todos, el rechazo de la población se hizo sentir. Por esta razón, Urribarri se manifestó decidido a no aceptar más presiones y aseguró que la decisión es irreversible.
Esta afirmación tira por tierra las esperanzas de los integrantes de la multisectorial que creían que Urribarri iba a salir a jugar a su favor. Es que, el ministro había manifestado que se iba a tener en cuenta la decisión de la mayoría de la población.