Según Monge, autor de uno de los proyectos en cuestión, “la sociedad actual, cada vez más plural en su composición y compleja en sus interrelaciones, necesita una policía también moderna y mejor preparada técnica, psicológica y humanamente, a la altura de los nuevos retos que se plantean”.
LA OBEDIENCIA DEBIDA
La iniciativa del convencional Monge establece que los miembros de la Policía “ se sujetarán a los principios de jerarquía y de subordinación, sin embargo, la obediencia debida no podrá amparar órdenes que entrañen la ejecución de actos u omisiones que manifiestamente constituyen delito o sean contrarios a las leyes” como asimismo establece que “ sus miembros en todos sus niveles de jerarquía, serán personalmente responsables de sus actos, de sus omisiones y de las órdenes dadas a sus subordinados”
Además destacó que “harto trascendente resulta la capacitación constante del personal policial en todas las disciplina propias de esta actividad y también en lo tocante a la formación integral. Derechos Humanos, Psicología, Psicología Social, Sociología, Antropología Social, en suma ramas del conocimiento cuyo aprendizaje le permitirán afrontar las situaciones complejas de la vida con mayor comprensión de las distintas diversidades”.
Uno de los puntos más importantes del presente proyecto es el de reconocerle a los integrantes de la fuerza de seguridad de la provincia su libre derecho “…a asociarse libremente a las organizaciones para la defensa de sus intereses, y obviamente a separarse de las mismas y a constituir otras organizaciones…”.
Al respecto, Monge explicó que dicho derecho se encuentra expresamente previsto por el art. 14bis de la Constitución Nacional, en cuanto, reconoce “el derecho de los trabajadores a una organización sindical libre y democrática, reconocida por la simple inscripción en un registro especial”.como también en diversos tratados y convenios internacionales – alguno constitucionalizados por el art. 75 de la Constitución Nacional, Por tanto “debe tenerse en cuenta que los derechos sociales incorporados a la Constitución Nacional en sus distintas reformas, entre los que se encuentran el derecho de todo trabajador a la sindicalización, son considerados derechos humanos básicos”.