Como sindicato han reclamado al gobierno provincial en reiteradas ocasiones que ponga atención al precario estado que exhiben algunos edificios escolares, obteniendo a cambio únicamente silencio la mayoría de las veces.
El episodio se da apenas cinco después días de ocurrida la explosión que causó la muerte a una docente y un ordenanza en la localidad bonaerense de Moreno. “Esto deja entrever que, así como ocurriera el pasado jueves 2 de agosto en la provincia de Buenos Aires, la patronal pareciera estar aguardando que se produzca una tragedia irreparable para comenzar a dimensionar la gravedad del problema”, señalaron desde el gremio.
“No queremos lamentar nuevas muertes para que el gobierno tome cartas en el asunto ni estamos dispuestos a aceptar que miles de compañeros trabajadores y sus alumnos deban concurrir a las escuelas para enseñar y aprender en condiciones que no sólo dificultan el acto pedagógico, sino que también ponen en riesgo sus vidas, lo cual es responsabilidad absoluta e indelegable del Estado como garante de la educación pública en la provincia”, remarcaron.