De este tipo de amparos quedarían sólo dos en pie, y eran las medidas judiciales que le impedían al gobierno a ejercer un reparto equitativo entre los exportadores. Así, las 12.000 toneladas distribuidas en 2004 mediante polémicos fallos judiciales caerán a 800 toneladas. Entre los que amparos que se desactivaron se encuentra el de Supbga, que el año pasado obtuvo 10% del millonario cupo, a pesar de no cumplir ninguno de los requisitos.
“Es la primera vez en la historia que la Hilton se reparte en tiempo y forma”, destacó un funcionario cercano al secretario de Agricultura, Miguel Campos. En rigor, todos los años se cumplía con este trámite varios meses después de julio, cuando se inicia el ciclo anual de exportaciones a la UE. Esa demora abría margen para graves sospechas.
En 2004, el poderoso ABC (Consorcio de Exportadores de Carne), que agrupa a los frigoríficos más grandes le imputó “irregularidades” al secretario de Agricultura. Muchos de los integrantes del consorcio habían perdido parte del negocio a manos de firmas amparadas. Con la brusca caída de esos recursos, varias plantas del ABC duplicarán los tonelajes que recibieron el año pasado. Es el caso de Gorina, Arre Beef, Quickfood y Finexcor.
En su primer año de gestión, Campos debió lidiar con un enredo judicial mayúsculo en torno a la Hilton, incluidas varias denuncias penales en su contra. La mayoría de los amparos surgieron en épocas de su antecesor, el duhaldista Haroldo Lebed, y llegaron a representar 50% del reparto. Ahora, con la limpieza de causas, los jueces repartirán el 3%.
Otro camino
Para no repetir esa historia, hace veinte días Agricultura cambió su estrategia: pasó el manejo de la cuota a la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA), a cargo de Marcelo Rossi. Este funcionario convocó a uno de los juristas más prestigiosos, el ex secretario de Justicia Enrique Paixao, para desarticular el complejo entramado jurídico.
La ONCCA, además, decidió aplicar a rajatabla la normativa. La nueva distribución se basó así en la Resolución 113/04, que entre otras cosas establece que un frigorífico debe exportar 2 toneladas de carne por afuera de la cuota para recibir 1 tonelada de Hilton. “Eso dejó a varios afuera”, dijo una fuente. El número de plantas adjudicatarias, de todos modos, sigue siendo elevado. En total son sesenta.
Hay heridos, pero de todos los bandos, grandes y chicos. Por caso, Agricultura comenzó a descontarle a Swift —el mayor exportador de carnes— casi 1.200 toneladas que obtuvo en 2003, mediante un amparo luego revocado. Y no otorgó cuota a otro fuerte jugador, CEPA, cuya quiebra se declaró hace pocos días.
