LAS PERICIAS
En la mañana de hoy el informe pericial de Gendarmería fue entregado a las partes y aún no quedó incorporado al expediente judicial, hecho que tendrá lugar en las próximas horas.
El resultado del mismo es categórico “y empeora ostensiblemente la situación del victimario” afirmó a DIARIOJUNIO, el abogado Briceño.
Las pericias realizadas determinaron que el disparo se produjo a menos de un metro de distancia. Así, se caen a pedazos los dichos del policía que pretendía exculparse y hacer aparecer como que se había trastrabillado, o que la víctima tenía un arma, etc. Puro ardid que ya no sirve para nada.
Además quedó demostrado que el policía tenía varios metales en sus manos y muñecas, algo que aparece cuando el disparo se efectúa a cortísima distancia.
Ahora solo resta la remisión a juicio. Debe decirse sí, que el policía está detenido pero con prisión domiciliaria.
BREVE RESEÑA
Sebastián, la víctima, tenía 20 años y estaba acompañado por Pedro, su hermano mayor, cuando a la salida del boliche Costa Cruz se dirigían a su casa y, en la esquina de San Luis y Quintana, pleno centro de Concordia, fue asesinado.
El policía Acosta le disparó al vehículo e hirió de muerte al joven con un certero balazo en la nunca y en presencia de su hermano.
En primera instancia el policía afirmó que el auto venía a gran velocidad, que había hecho una maniobra en el que casi los chocó, que los jóvenes tenían un arma, etc, etc, puro ardid, según las pruebas irrefutables.
ARMA PLANTADA
Muchos de los dichos ya estaban casi descartados. Ahora, definitivamente descartados. De hecho el fiscal de la causa Fabio Zabaleta, había afirmado a DIARIOJUNIO, que si bien cuando él llegó al lugar había una arma en la alfombra del lado derecho, el policía que acompañaba al suboficial durante la presunta persecución reveló que no vio armados a los Briozzi ni mucho menos la utilización de alguna. Por otra parte, el fiscal reiteró que no fue identificada una “tal mujer” que le habría dicho a los uniformados que vio un revolver en poder de los ocupantes de la Chery gris. Además, Zabaleta constató que ni la camioneta ni el patrullero tenían rayón ni golpe alguno que “dieran cuenta de una persecución”.
SOLO RESTA…
Ahora solo resta la elevación de la causa a juicio.
