No se puede trabajar en campañas de prevención, asistencia, tratamiento psicológico, seguimiento de las áreas de seguridad e instalación de sistemas de monitoreo, sin una fuerte decisión política que las acompañe. Decisión que se traduce en un presupuesto acorde para mantener una estructura que, solo a nivel de la Municipalidad de Concordia, supera las 50 personas. La preocupación, el interés y la consecuente responsabilidad que ello implica, no se ve reflejada en el Presupuesto Nacional, en tratamiento en el Congreso Nacional.
Todo presupuesto es el espejo de los objetivos de gestión de un gobierno. La Ley de Leyes es la que nos permite analizar la importancia que un gobierno le otorga a la cultura, la ciencia, la acción social, las políticas habitacionales y, en nuestro caso, las políticas de género: de la que todos hablan, pero nadie incluye como tales. Es lastimoso ver la utilización de estos temas tan sensibles cuando de hacer campaña con las mujeres se trata.
Utilización al punto de aprobar leyes que en sus conceptos son necesarias e imprescindibles, como la llamada Ley Micaela, pero que sin presupuesto para aplicarla se pierden en la maraña de la burocracia estatal, reduciéndose a una expresión de deseos con mucha prensa pero sin ninguna posibilidad de hacerse realidad.
La Ley de Presupuesto Nacional 2020 solo destina el 0,0067% del total de 271,7 billones de pesos presupuestados para el año próximo. ¿Se puede pensar en políticas destinadas a prevención, asistencia, atención en violencia y otros flagelos sociales que sufren las mujeres argentinas con un presupuesto como el previsto? Es evidente que no, que no es suficiente y que no alcanza. }
Pero no solo se mide el Presupuesto en números, se mide en interés. Y resulta claramente expresado que las políticas de género no tienen resultados electorales medibles, que no se visualizan en votos positivos o negativos y que las mujeres solo son protagonistas cuando son golpeadas o asesinadas.
En consecuencia, quienes integramos el Programa Local de Lucha Integral contra la Violencia de Género y como miembros de un equipo que ha asumido con compromiso y responsabilidad una competencia que algunos todavía hoy piensan que no es propia de un gobierno local, pedimos, solicitamos y exigimos que el Presupuesto Nacional prevea una cifra que permita al Instituto Nacional de las Mujeres y a las Áreas de las Mujeres de cada provincia y de cada ciudad, administrar los fondos necesarios e imprescindibles para luchar contra esta realidad que nos mata cada día.
