Una rápida recorrida por Banco Pelay revela que será necesario comenzar a trabajar de inmediato para llegar a tiempo al inicio de la temporada.
Los baños mostraban una imagen de abandono. No obstante, eran usados por la gente que concurrió a la playa. La playa está muy sucia y los bungalows tienen los vidrios rotos, algunas puertas vencidas y mucha suciedad en su interior y en los alrededores. Cables y tomacorrientes cuelgan de las ramas de los árboles y no hay nadie que controle el ingreso de los bañistas a la playa.
El intendente Marcelo Bisogni, junto a Jorge Gay, director de Turismo, recorrieron Banco Pelay el pasado viernes y constataron el estado en el que se encuentra. Manifestaron que «la bajante del río permitirá continuar y profundizar el programa de actividades y trabajos de cara a la próxima temporada».
En el balneario además se revisó la instalación existente y se pudo comprobar que en el sector del bulevar Elvio Suárez, donde debe extenderse la nueva cañería está poco inundado.
Al respecto destacaron que tal vez desde la próxima semana – según las estimaciones- pueda darse continuidad a estos trabajos, como así también la disposición del servicio eléctrico. En estos momentos los materiales están en proceso de licitación de compra y ya fue aprobada la mayoría de las propuestas para la explotación de los sectores. El propósito del Municipio es realizar la inversión necesaria para brindar los servicios básicos durante los cuatro años.