De acuerdo a los datos proporcionados por el pluviómetro, la cantidad de lluvia caída durante la jornada de ayer fue de 34 mm, lo que sirvió para mitigar el agobio de la población, haciendo que las temperaturas bajaran un poco y tornaran el ambiente más agradable.
El meteorólogo de Urdinarrain, Eduardo Aubert, adelantó que para hoy miércoles hay posibilidades de que el tiempo se presente inestable, con chaparrones aislados en toda la zona del centro sur de la provincia. Para el jueves, en tanto, se esperan lluvias un poco más copiosas con inestabilidad durante todo el día. Ya el viernes, destacó Aubert, comenzará a notarse un descenso de temperaturas más significativo y con lenta mejoría.
Sobre si se sostiene la probable presencia de granizo, dijo que “siempre hay que tenerlo en cuenta cuando las condiciones climáticas se presentan con estas características de inestabilidad”.
Aubert anunció que hasta el momento se tiene que descartar una nueva ola de calor para lo que resta del verano, “pueden darse algunos días de calor pero no como los que tuvimos esta semana”. Después las temperaturas estarían descendiendo a niveles inferiores comparados con estadísticas de años anteriores.
En cuanto a la temperatura máxima registrada ayer, César Chioza de la Estación Experimental del Inta local aseveró que alcanzó los 36,8º a las 12, en tanto la mínima que pasó a darse por la tarde fue de 23,5º debido a la presencia de las lluvias.