“No son masivos, pero se van sucediendo. Son distintos despidos, distintos arreglos con algunos trabajadores”, indicó. Simonetti sostuvo que el CEC interviene en los conflictos que se producen en las grandes empresas o en las medianas que se encuentran con una situación consolidada. “Pero también hay otra realidad”, dijo. Y en ese plano se encuentran las empresas que sufren una notable caída de ventas. “Eso hace que muchos no puedan continuar con la actividad”, manifestó.
La suba de los alquileres combinado con el ajuste en los servicios públicos y la actualización de la carga impositiva se convierte en una carga demasiado pesada en algunos casos que los arrastra hacia al fondo. “El comercio, como otras actividades, está muy mal”, indicó el gremialista. “Si esto no se revierte rápidamente, vamos a seguir teniendo despidos y esto va a ser más conflictivo todavía”, señaló.
A la par, indicó que en la ciudad no hay creación de empleo. “Salvo raras excepciones”, añadió. En consecuencia, el trabajador se encuentra con un panorama complicado dado que debe tratar de negociar sabiendo que en este momento no hay mercado laboral disponible.
“Si los pronósticos son que la recesión recién empieza, va a ser muy difícil sostener un par de meses más o de acá a fin de año porque la gente está al límite y en las empresas el hilo se corta por lo más delgado. Esto se tiene que revertir de alguna manera porque si no, vamos a terminar con muchos trabajadores en la calle y recuperar eso va a ser muy difícil”, indicó