Desde la CGT que lidera Hugo Moyano, ninguno de sus referentes quiso arriesgar cifra alguna sobre el monto que reclamará mañana en la mesa de las negociaciones, mientras que la CTA que encabeza Hugo Yasky, reitero que reclamará un salario mínimo de 2.347 pesos.
En declaraciones a DyN, el apoderado de la CGT, Héctor Recalde alertó que el monto del salario mínimo que defina el Consejo «no tiene otra implicancia que la corrección del sueldo mínimo tal como lo expresa la Ley de Contrato de Trabajo y la Ley de Empleo y afecta exclusivamente a los trabajadores de la actividad privada y de la Administración Pública Nacional».
De esta forma, Recalde salió al cruce de versiones lanzadas desde el sector empresario sobre un supuesto «efecto dominó» que acarrearía el aumento del salario mínimo.
«Es una estrategia que utiliza la patronal para resistir a la corrección del salario mínimo, cualquier derivación que se le atribuya al aumento no es cierto no tiene otra proyección», enfatizó Recalde.
En tanto, el titular de la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA) Hugo Yasky le reiteró a esta agencia el pedido de aumento del «60 por ciento» para el sueldo mínimo que realizará mañana esa central.
«Nosotros reclamamos un salario mínimo de 2.347 pesos, a nivel nacional y el mejoramiento del mismo en las provincias y los municipios además de la actualización del salario familiar para los trabajadores del NEA y el NOA», adelantó Yasky.
Reiteró además que la CTA «exigirá la continuidad en el funcionamiento del Consejo del Salario para definir el costo de canastas básica, para sea referencia y para evitar la disparidad entre las cifras que traen a la mesa los empresarios y nuestro reclamo».
Agregó que la CTA pedirá también por la «urgente normalización del INDEC por la situación irregular por la que atraviesa afecta cualquier tipo de medición». Cuando esta agencia le preguntó a Yasky si los 2.347 pesos que reclaman eran inamovibles, el dirigente contestó que «tenemos un piso de 2.200 pesos».
