Del encuentro participaron propietarios de boliches bailables, pubs, bares, drugstores, cafés y otros locales gastronómicos.
En nombre de este abanico, Roberto Erramuspe, propietario de un local de comida rápida, explicó que la cuestionada ordenanza se tejió “entre gallos y media”, para “imponer restricciones horarios a la diversión nocturna. Sin tener en cuenta que ya hay gente contratada, ya hay negocios en marcha, que afecta a la fuerza de trabajo”. Asegurando que “al cerrar mas temprano, vos tenés que disminuir personal, te afecta a los ingresos, a la inversión calculada y una fuga de capitales a ciudades vecinas como Salto (Uruguay)”.
Luego de haber solicitado una reunión con las autoridades municipales, los comerciantes serán recibidos mañana por el secretario de Gobierno Alfredo Francolini. “Nosotros vamos a pedir que den marcha atrás, porque las tres y no las 5, a quieren educar, uno se educa uno mismo”, aseguraron.
Agregando que “a la gente no se le enseña” con este tipo de medidas, “la gente tiene una cultura y un modote vivir y no porque a 5 o 6 personas se le ocurra que van a mejorar la conducta de los chicos”.