Según se adelantó desde la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina (APAMA), se espera una cosecha de alrededor de 8000 (ocho mil) toneladas en el mercado de frescos que, de acuerdo a como estén los precios, se derivarán en un 90% aproximadamente para mercados de exportación.
“Los campos están muy bien, el potencial lo tenemos. El año pasado el invierno nos demoró la producción a la primavera, pero hoy las variedades están más adelantadas”, indicó Alejandro Pannunzio, presidente de APAMA.