“Esto se iba a dar en nuestra comunidad como se está dando en todas las comunidades. No hay manera segura de parar el virus. Esto lo venimos viendo en todo el mundo. Esta situación era esperable”, dijo Walser quien además le pidió a la comunidad responsabilidad. Asimismo, dijo que este mediodía iban a firmar el decreto para que se ponga en vigencia la fase 1 en la ciudad.
Al ser consultado sobre las reuniones sociales, Walser indicó que aún no estaba la normativa vigente que habilitase esa actividad. En tanto, los gimnasios sí tenían autorización con un protocolo específico para dos personas simultáneamente por turno. El intendente explicó que eso se daba debido al proceso de flexibilización que se venía llevando adelante. La ciudad ya había llegado a un 90 % de apertura de las actividades económicas.
La intención de las autoridades es que durante 14 días se paralice la ciudad para evitar contagios en caso de que haya contagios que surjan en ese lapso. “Hay que ver hasta donde pudo haber llegado el contagio inicial. Por eso la sugerencia al COES fue que volviéramos a fase 1 porque eso nos permite congelar el movimiento de la gente entre sí. Todo el mundo ha visto que había bastante más movimiento que en la fase inicial. Había comercios abiertos e interacciones entre las personas. El congelar ese movimiento va a ayudar que tengamos una idea más cabal de hasta donde pudo haber contagios”, dijo la directora.
El 28 de mayo una persona comenzó con los primeros síntomas. Por ende, dijo que se debe mirar 10 días para atrás para saber cómo provino el contagio. Si bien ninguno de los cuatro casos confirmados viajo fuera de la ciudad, un familiar de ellos lo hizo. “Estamos estudiando ese nexo epidemiológíco para ver si ese pudo ser el vínculo del contagio”, dijo. Pero la persona que viajó no tiene síntomas.
“Otras de las personas que estaban en contacto estrechos de los casos positivos se realizó el hisopado y de acuerdo con el área de Epidemiologia, están realizando un aislamiento en forma domiciliaria”, señaló Hernández.
Uno de los casos activos es una persona que instalaba aires acondicionados, otra tenía relación laboral con un kiosco por donde transitó mucha gente. En consecuencia, las autoridades buscan cerrar el círculo alrededor de las personas que ya tienen un diagnóstico confirmado.
“Existe otro cúmulo de personas que habían consultado al hospital, algunos en forma presencial. Esa situaciones se evaluaron y aquellos que habían tenido contacto pero no estaban asintomáticos se les explico que debían realizar aislamiento domiciliario y también en virtud de que una de las personas tiene actividad realizada con gimnasios y cómo esa actividad había realizado un proceso de flexibilización en esta semana y había algunas personas que habían asistido se hizo un relevamiento telefónicamente de todas las personas que habían asistido y se les indico que hagan el aislamiento”, dijo la directora.
A todas las personas que se les indicó el aislamiento se les está realizando un seguimiento vía telefónica de los síntomas. “Tienen la expresa indicación de que si se inician con algunos de los síntomas típicos de coronavirus como dificultades respiratorias, dolor de garganta o trastorno del olfato o del gusto se comuniquen al hospital para proceder al aislamiento institucional y a las tomas de muestras de hisopados”, señaló Hernández.