Respecto de la manifestación anterior, hubo dos novedades: la merma pronunciada en el número de concurrentes y el permiso para que puedan ingresar con sus vehículos al playón. De todas formas, poca gente ingresaba al centro comercial. Por las dudas, una decena de policías se apostó en la puerta del hipermercado, acompañados por un número similar de guardias de seguridad.
Juan José Simonetti, secretario general del Centro de Empleados de Comercio, expresó a DIARIOJUNIO: “estamos de vuelta en la puerta del hipermercado porque no obedece a ninguna razón, siguen insistiendo en que los trabajadores tienen que estar trabajando los domingos y nosotros estamos pidiendo para que esos trabajadores puedan estar en sus casas y en familia”.
Respecto del cambio de modalidad, indicó: “nadie quiere franquear la entrada ni nada por el estilo sino simplemente hacernos conocer, decirle a la gente que viene a comprar que no lo haga por los trabajadores que están adentro”.
El gremialista expresó que, más allá que algunos comercios menores abrieron sus puertas, “todos los comercios grandes están cerrados, han acompañado esta medida y la pelea se ha decidido contra esta empresa que no obedece a ninguna razón”.
Los integrantes del CEC permanecieron durante toda la jornada. “Vamos a estar todo el día esperando que ellos se dignen a cerrar sus puertas y a darle el francio que les corresponde a los trabajadores”, dijo Simonetti.
