El Jugado a cargo de Maximiliano Benítez tiene a su cargo la denuncia por “abuso de poder”, entre otros delitos, realizada en noviembre de 2006 por el ex concejal Eduardo Miranda, el ex titular de la Fiscalía de Investigaciones Administrativa (FIA), Oscar Rovira. En ella quedaron comprendidos el ex intendente Cresto, los concejales Martín Santana (PJ), Roberto Abel González (PJ) y los ex-concejales Jorge Ferrera, Heriberto Pezzarini, Roberto Chabrillón, Marcos Wdowiak y Ricardo Zubillaga. La denuncia se basa en la entrega por 20 años del Campo del Abasto a una empresa privada sin haber efectuado un llamado a licitación pública.
Esta mañana, el juez y el fiscal que entiende en la causa se reunieron para recordar si había quedado documentación de importancia en la causa. Hasta ahora, creen que no había ningún papel que pueda clasificarse en esa categoría. “No había nada” confió la fuente. En realidad, la investigación apunta en este tramo a la recolección de datos que obran en empresas privadas.
En tanto, el subsecretario de Medio Ambiente municipal, Néstor Loggio, aseveró que el siniestro fue “intencional”. “El fuego vino de afuera hacia adentro. No creemos que haya sido un problema eléctrico porque todos los circuitos están cerrados”, indicó. El fuego se desató cerca de las 23 y los empleados se habían retirado a las 16. “No hay ninguna posibilidad de que haya sido una chispa del circuito eléctrico”, añadió.
Loggio sostuvo que “alguien vino y prendió fuego a una montaña de basura que había al costado del galpón”. El extremo de una de las cintas transportadoras estaba en contacto con esa pila de basura. Por ende, las llamas se apoderaron de las cintas de caucho. A medida que el fuego corría, fue dañando la estructura. “Se quemaron totalmente las dos cintas transportadoras que tienen un valor muy importante”, indicó. Además, sostuvo que hay un motor eléctrico quemado en su totalidad.
El agente policial de guardia alertó a tiempo, al ver las primeras llamas, a los bomberos porque el daño podría haber sido mayúsculo. “Lo que ocurre es que mientras él llama y los bomberos llegan pasan varios minutos y eso es todo material inflamable”, indicó. Desde hace dos o tres meses la municipalidad contrató la custodia debido un intento de robo. El incendio de ayer generó una causa prevencional a cargo de la Comisaría 7°, con conocimiento del Juzgado de Instrucción de turno Nº 1.
Lo que alcanzó a salvarse de las llamas fueron la estructura total de la máquina, los gabinetes de control eléctrico, el sistema automático y una prensa. No obstante, Loggio no menospreció el valor de las cintas. “Estamos hablando de varios miles de pesos”, indicó.
En consecuencia, aseguró que el incidente obliga a redactar un nuevo acuerdo con Cetru. “Teníamos el acuerdo prácticamente hecho la desvinculación de Cetru”, dijo Loggio.
En ese sentido, el presidente del bloque de concejales del PJ, Mariano Giampaolo, aseguró esta mañana que la concesión “lamentablemente fracasó”. Luego acotó que “lo que se estaba estudiando es arribar a un convenio que definitivamente produzca la salida de la empresa (Cetru) del Campo del Abasto”, dijo.
El edil sostuvo que actualmente hay una acción judicial de desalojo promovida por el Ejecutivo contra Cetru y “la amenaza de acciones judiciales de parte de la empresa contra el municipio”. En consecuencia, las autoridades estudian la posibilidad de poder confeccionar un convenio que permita una salida “consensuada” de la concesionaria.
En la actualidad, la basura se vuelca a cielo abierto. “Es lo peor que se puede hacer con la basura a niveles ecológicos”, opinó el titular del bloque.
El municipio debe acordar con la empresa dos cuestiones todavía: las inversiones en la planta -“no todas las que prometió”, acotó- en infraestructura y maquinaria, y el plazo de la concesión que restaba hasta la finalización del convenio. “Una interrupción como la decidida les permite a ellos algún tipo de acción contra la municipalidad”, explicó el titular del bloque. Giampaolo prefirió no utilizar el término indemnización. “No se está hablando de indemnización sino pago para la adquisición de esa infraestructura”, señaló.
En consecuencia, el municipio debe determinar que es lo que queda, si esa maquinaria sirve o no y finalmente “si tiene algún valor”. “De acuerdo a esos informes, si la municipalidad lo va a poder seguir usando hay que ver cuales las posibilidades de que eso quede en el Campo del Abasto”, indicó el titular del bloque.
La salida de Cetru incluiría la posibilidad de que el municipio, a través de cooperativas, “sistemas de tercerización” o de personal municipal pueda seguir adelante con el reciclado. “Eso no está resuelto”, dijo. Tampoco se determinó si se debe indemnizar al personal –hay 11 empleados– y si pueden seguir trabajando. Giampaolo descartó que puedan adquirir alguna relación de dependencia con la municipalidad pero deberían estar organizados para prestar el servicio. “Hay una preocupación muy fuerte del municipio para que de alguna manera se lo solucione porque son trabajadores, personas de escasos recursos y no se los puede dejar de un día para el otro en la calle”, indicó el edil.
Loggio incluso sostuvo que Cetru seguía funcionando como una empresa “tomada”. “Los muchachos diariamente, con sus limitaciones porque no tienen todas las herramientas necesarias; no tienen camión; no tienen pala, de alguna manera la están haciendo funcionar porque sacan la manutención de ellos”, explicó. En cambio, mañana será “totalmente imposible” poner en marcha la maquinaria afectada.
Volviendo a la cuestión judicial, desde el Juzgado aseguraron que la causa no prescribirá el próximo 19 de octubre. Ese día se cumplen 2 años desde que firmó el convenio y la pena por incumplimiento de los deberes de funcionario público comprende ese lapso. Pero debido a que tres de los denunciados siguen ocupando cargos públicos (Cresto es convencional constituyente y Santana y González concejales) el plazo de prescripción se interrumpe para todos por igual.
