«Discurso de odio no es crítica, ni siquiera insulto. Es profundamente ideológico: es el discurso de la ultraderecha. El discurso antidemocrático. El discurso que, como Patricia Bullrich, se niega a repudiar un intento de magnicidio porque quiere seguir alentando a la jauría», escribió Cerruti en su cuenta personal de Twitter.
La portavoz respondió de esta manera una publicación de Bullrich del jueves por la noche, en la que no repudió el atentado contra la Vicepresidenta, al tiempo que rechazó el feriado dispuesto por el presidente Alberto Fernández para el día de ayer, para facilitar la movilización en defensa de la democracia a la Plaza de Mayo y otros puntos del país.
«El Presidente está jugando con fuego: en vez de investigar seriamente un hecho de gravedad, acusa a la oposición y a la prensa, y decreta un feriado para movilizar militantes. Convierte un acto de violencia individual en una jugada política. Lamentable», había publicado Bullrich.
Otra voz del oficialismo que se sumó en la crítica a Bullrich fue Jorge Capitanich. El gobernador de Chaco dijo en declaraciones radiales que es «preocupante» la actitud de la titular del PRO. «Objetivamente desterrar el odio como práctica violenta del discurso político es compromiso de todos. Todos los partidos sin excepción debieran manifestarse. Algunos dirigentes de la oposición no lo han hecho lo cual constituye un gravísimo hecho”, afirmó.
“Ayer en la reunión del consejo hubo una clara manifestación del Presidente de efectuar una convocatoria de esa naturaleza», siguió Capitanich sobre el diálogo entre oficialismo y oposición. «Quedamos en llevar recomendaciones para involucrar la participación de los partidos de la oposición”, afirmó.
“La actitud que tienen no se condice con la gravedad del problema; debemos construir todos un marco para la no proliferación del odio”, resaltó en diálogo con El Destape. “Este es un punto de inflexión en la historia argentina, hay que poner un límite total y definitivo; este es el límite, la violencia”, cerró.
