Villafañe recalcó que, una vez que se tenga el gas natural, con publicidad y promoción, “vamos a poder seguir adelante”. Admitiendo que “no es el mejor momento para cerrarlas -lo ideal hubiese sido aprovechar este período de vacaciones de Buenos Aires-, ya que esta situación perjudica a los hoteleros, restaurantes y toda la ciudadanía”, pero explicó que “los acontecimientos se precipitaron negativamente”. Detallando que “por ese motivo hablé con anticipación con los hoteleros y dueños de bungalows, haciéndoles conocer esta realidad. Y de ellos surgió la idea de pedir un subsidio a la Intendencia local, del que tanto se habló, y que, en realidad, no nos pareció acertado gestionarlo, pues éste es un emprendimiento privado”, sostuvo.