De la misma forma consideró los paros. Si realizaban nuevas huelgas, no se iba a reintegrar el dinero correspondiente al paro de 72 horas efectuado al inicio de las clases. “Es una imposición”, indicó. Cerato dijo que de esa manera “no se respeta el derecho de los trabajadores.
Por otra parte, la gremialista dijo que se decidió aceptar bajo la premisa de seguir negociando a partir de junio o julio. Dejando de lado lo salarial, Cerato sostuvo que “la lucha continúa”. “No sólo por el salario son también por mejores condiciones edilicias y todo lo que hace a condiciones de trabajo, concursos”, explicitó.
Un docente de primaria que recién comienza a trabajar percibirá cerca de $ 3.300. “Estamos lejos de lo que inicialmente planteábamos”, señaló la secretaria general.