“Para apostar a la integración regional y a la conformación de un bloque común permanente, tuvo lugar ayer en Salto el Primer Encuentro Binacional de Centros Comerciales de la Costa del Río Uruguay”, dice el comunicado enviado a DIARIOJUNIO.
Además de los centros de Concordia y Salto, inspiradores del encuentro, participaron la mayoría de las localidades nucleadas en la UEPER (Unión de Entidades Pymes de Entre Ríos): Federación, Gualeguaychú, Gualeguay, y San José, mientras que Colón, Chajarí, Concepción del Uruguay, Villa Elisa y Urdinarrain, entre otras, hicieron llegar su total adhesión. Por el lado uruguayo, estuvieron presentes Bella Unión, Mercedes y Soriano, en tanto que Fray Bentos, Carmelo y Paysandú adhirieron al evento.
Al cerrar las deliberaciones, por unanimidad se resolvió darle continuidad a los vínculos, gestando un espacio que fue bautizado como “Encuentro Internacional de Centros Comerciales del Río Uruguay”, que volverá a reunirse en Colón el 19 de septiembre próximo, teniendo por asunto central a tratar el problema del verdín en las aguas del lago y del río.
En esa próxima cita serán invitados a sumarse los centros comerciales de localidades correntinas asentadas a orillas del Uruguay, y también es intención que se integren las ciudades costeras de Brasil.
Miguel Ángel Errea, presidente del centro salteño, tuvo a su cargo la coordinación de los debates de ayer. Al dar la bienvenida, dijo sentirse “sorprendido por la gran concurrencia a esta cita que partió de nuestros amigos del Centro de Comercio de Concordia”, entidad que estuvo representada por su presidente, Horacio Fratichelli, por su gerente José Persigo, y varios integrantes de la comisión directiva, entre ellos Antonio Riggio, Walter Kleiman, Silvia Francolini, Gustavo Guinsel y Sebastián Di Nardo. En varios momentos, las entidades de una y otra costa coincidieron en que las ciudades de ambos países atraviesan por problemas que son comunes, y que el trabajo en conjunto contribuirá a solucionarlos, desde una visión superadora de los conflictos. Se mencionó, entre ellos, la informalidad y el contrabando, el deterioro de las aguas del lago y del río, y las grandes transformaciones que se avecinan ligadas a la economía global, que repercuten en el tránsito, el ambiente y los modos de producción agrícola e industrial.
A modo de ejemplo sobre lo que se puede lograr trabajando en común, se resaltó la instrumentación de la tarjeta vecinal, que muy pronto comenzará a emitirse, habiéndose ya preparado una oficina para ese fin en el paso de fronteras entre Concordia y Salto. También hubo elogios hacia la Licenciatura Binacional en Turismo, que se cursa en ambas ciudades, con título válido en los dos países, en esfuerzo conjunto de la Universidad de la República y la Universidad Nacional de Entre Ríos.
“El verdadero MERCOSUR lo hacemos nosotros, los que habitamos la frontera” se escuchó decir a uno de los representantes uruguayos, remarcando que el centralismo de Buenos Aires y Montevideo suele no tener en cuenta la realidad de la región.