En este tramo del proceso se trata específicamente la causa Nº 1.960/10, en la que se investigan delitos de lesa humanidad ocurridos durante la última dictadura militar en la ciudad de Concepción del Uruguay y hoy se sumaron hechos ocurridos en la ciudad de Gualeguaychú. Los testigos que comparecieron ante el Tribunal Oral Federal de Paraná encabezado por la jueza Liliana Carnero fueron: Jorge Balerdi, Roberto Balla, Ricardo Freire (los tres soldados del Regimiento de Caballería Nº 2 de Gualeguaychú), Hugo Fati, médico del mismo destacamento y Enrique Viela ex policía de la Federal de C del Uruguay.
Jorge Balerdi dijo que el 1976 ingresó a hacer el servicio militar en el destacamento de Gualeguaychu. Ante la pregunta de la fiscalía de si sabía de la existencia de personas detenidas durante 1976 en dicho destacamento, el testigo respondió que: “Hubo personas detenidas, que estuvieron alojadas en la cuadra donde se encontraban las habitaciones del personal de guardia, pero yo nunca las pude ver”. Al respecto de los detenidos dijo “Con los años me enteré quienes eran los que estuvieron ahí: Jorge Felguer, Martínez Garbino y Angerosa” y dijo que había uno más pero que no recordaba su nombre. Continuando con su relato Balerdi dijo que los detenidos solo salían para ir al baño por la noche, cuando la mayoría de la tropa descansaba.
Con respecto a quienes eran sus superiores en aquel momento el testigo nombró a Valentino, a quien conocía de aquella época, como el primer jefe del destacamento y también a Kelly de Morales, otro de los imputados, que tenía el cargo de jefe de sección.
En otra parte de su testimonio Balerdi dijo que era frecuente ver al jefe y sub jefe de la Policía Provincial entrado al despacho del Mayor Valentino y que por aquellos años participó de un operativo conjunto con la policía “en el que se incautaron armas pero no hubo detenidos”.
El siguiente en declarar fue Roberto Balla quien también cumplió funciones en el regimiento de Gualeguaychú durante 1976. Balla declaró haber participado del operativo en el que fue detenido Hugo Angerosa, una de las víctimas que prestara declaración en esta causa semanas atrás. El ex militar dijo al respecto de la detención que “yo no sé que hicieron Angerosa porque antes que termine el operativo yo me tuve que volver al regimiento”.
El testigo dijo que luego de unos días vio a Angerosa en una de las habitaciones del destacamento militar y que le sacó una venda que tenia tapándole los ojos. “Le pegué el tirón para sacarle la venda y le arranqué las pestañas de tan pegada que estaba”.
Volviendo sobre su participación en el allanamiento de la casa de los padres de Angerosa el testigo dijo que en el operativo además de participar personal militar también lo hizo un auto de la Policía Federal.
Había comentarios de que la Policía Federal los interrogaba”, manifestó, y señaló que en el lugar “había una granja que estaba toda destruida”. En la causa acotó que en esa granja “había visto gente detenida”, pero este viernes no lo ratificó. En tanto, denunció que al Ejército “entraban autos de la Policía Departamental de Gualeguaychú, entre otros vehículos de civiles”.
El siguiente en brindar sus testimonios con respecto a los hechos ocurridos en el Escuadrón de caballería de Gualeguaychú durante 1976 fue el médico de ese destacamento Hugo Foti, quien dijo “yo nunca atendí a ningún detenido, ni supe que los hubiera” .
Por otra parte Enrique Viale, quien durante la dictadura cívico – militar ejerció el grado de oficial inspector en la Delegación de la Policía Federal en Concepción del Uruguay, declaró ante el Tribunal Oral Federal de Paraná, pero en su testimonio intentó no involucrar a los imputados.
El testigo dijo no saber nada respeto de la existencia de un grupo de jóvenes detenidos en el casino de sub oficiales del destacamento donde él prestaba servicios. Cabe señalar que en la audiencia de ayer cinco ex compañeros suyos de la Policía Federal declararon lo contrario.
“No recuerdo haber visto a ese grupo. Sí ví a varios detenidos de Gualeguaychú que estuvieron dos días en el hall. Recuerdo a un doctor de apellido Urdapilleta, una chica Chacón, y a un joven Guastavino. Estuvieron detenidos transitoriamente, no sé por qué motivos”, manifestó
Además, explicó que tras el golpe militar, la Policía Federal dependía de las órdenes del jefe de Área del Ejército, que en ese entonces era el Teniente Coronel Raúl Schirmer, y que éste se reunía todas las mañanas y noches con el comisario Vera, jefe de la Delegación de la Federal.
La audiencia se retomará el próximo miércoles a partir de las 11 de la mañana cuando se continúe con la etapa de declaraciones testimoniales.