Siete testigos a la mañana, y otros 13 por la tarde, declararon ayer en la Cámara de Apelaciones de Concepción del Uruguay, ante el tribunal integrado por las doctoras Mariela Rojas de Di Pretoro, Alicia León y Patricia Pérez.
Una parte importante de los testigos fue citada por haber visto en Pelay una moto similar a la de Flavia. Algunos de ellos conocían a la joven asesinada y otros simplemente relacionaron las características de la moto con el hecho, sumado a que camino al Pelay hallaron sus efectos personales.
Del testimonio de un compañero de la mensajería surgió el comentario que realizó el padre sobre una moto y una camioneta que vio el día de la desaparición, por lo que fue citado en ese momento a declarar, llegando unos minutos más tarde. Eso extendió la jornada vespertina de la audiencia, que comenzó a las 16:30 y finalizó pasadas las 22.
Cinco integrantes de la familia Ayala fueron citados a declarar. Entre ellos Soledad Ayala, quien durante la instrucción declaró que el Nene Ventos la había amenazado con que le iba a pasar lo mismo que a Flavia, aunque unas horas después para “tranquilizarla” le dijo que él no la había matado, “sólo le había pegado un macetazo”, apuntó. En ese momento Elida Corazza de Schiavo, madre de Flavia, sufrió una descompensación y se debió forzar un cuarto intermedio.
También declararon Jorge, Marta, Leticia y María Angélica Ayala, integrantes de la familia que viviendo en barrio La Concepción habrían tenido contacto con Ventos y Alvarez pudiendo acercar algunos testimonios sobre algunos dichos.
La audiencia continuará hoy desde la mañana con más testigos, e incluso se podrían sumar algunos más, pedidos por la defensa a raíz de los testimonios oídos ayer, aunque eso quedó a consideración del Tribunal.
