Tal como se desprendía de las audiencias celebradas la semana pasada, la justicia encontró a los acusados, como los autores materiales de los tormentos y castigos, tanto físicos como psicológicos, que sufrieran los jóvenes Fabián Alem, Horacio Rodríguez, Claudio Morales y Víctor Balbuena. Este último muriendo ahogado en las frías agua de el arroyo Ayuí, donde fueron arrojados y abandonados por los uniformados.
Los implicados vieron agravada su situación, por tratarse de integrantes de una fuerza que teóricamente debe velar por valores fundamentales de cualquier ciudadano.