
“En mi casa se han caído árboles, hemos llamado al Vivero Municipal para que se lleven el árbol y para plantar otro, pero nunca lo hicieron. Terminé plantando yo un arbolito que tenían en el fondo que me encanta porque es un árbol hermoso”, dijo Saldaña. De la misma forma, indicó que una parte de otro árbol se está cayendo en el garaje de su casa y ya pidió cuatro veces a la municipalidad que intervengan, pero no vienen. “Terminamos poniendo un tutor para sostener el árbol”, indicó.
No obstante, no todos comparten la idea de plantar un árbol en la vereda. La excusa más usual es que las raíces levantan la vereda. Saldaña admite que eso es un problema pero hay soluciones. Una de ellas es plantar un árbol con tubo de PVC. Consiste en crear un hoyo lo suficientemente profundo cerca del árbol recién plantados, colocar un tubo de plástico enterrado en posición vertical al lado de cada árbol, dentro del mismo hoyo realizado para el arbolito; el agua vertida en la parte superior baja al subsuelo para estimular raíces profundas. El tubo debe ser de 80 cm o más y debe tener piedras en su interior.
Por otra parte, Saldaña sostuvo que pudo observar que, durante el acampe piquetero en la avenida 9 de Julio de CABA realizado esta semana, una periodista tenía un termómetro laser digital y tomaba la temperatura del suelo a las dos de la tarde, incluso con niños. “Cuarenta y dos grados marcaba la temperatura en ese aparato. Se iban a un lugar con sombra y la temperatura bajaba a treinta y ocho grados”, dijo.
Está comprobado científicamente que los arboles contribuyen a la mitigación de los efectos del calentamiento global. Karina Jensen, doctora en Arquitectura y Urbanismo e investigadora del CONICET, indico que parte de la importancia de los árboles se debe a que son grandes mitigadores del cambio climático ya que permiten que la temperatura concentrada por el asfalto se reduzca entre dos y ocho grados. Así, se ahorra de un 20 a un 50 por ciento de energía ya que se disminuye la utilización de aires acondicionados e iluminación eléctrica, entre otros dispositivos. “Contar con vegetación que purifique el aire y que nos ayude a pasar menos calor es parte del derecho al ambiente digno que tenemos como ciudadanos. Con el avance de la deforestación, hemos perdido los beneficios de los árboles para nuestro día a día”, continuó Jensen. (https://www.el1digital.com.ar/ciencia/los-arboles-claves-ante-las-olas-de-calor-y-el-cambio-climatico-en-las-ciudades/).
En las grandes ciudades se produce el efecto isla de calor: el asfalto y hormigón absorben calor durante el día y lo emiten por la noche, haciendo que la temperatura sea mucho más alta que en lugares cercanos donde predominan la tierra y los árboles. Un estudio publicado el 31 de enero de este año en The Lancet con datos de 93 urbes europeas (donde viven 57 millones de habitantes mayores de 20 años) estima que alrededor de 6.700 muertes prematuras se deben a este fenómeno y señala que un tercio de esos fallecimientos podría evitarse plantando árboles en un 30% del espacio urbano. Los datos, de un verano tipo en 2015, muestran que los entornos urbanos fueron de media 1,5° C más calientes que las áreas cercanas. https://elpais.com/clima-y-medio-ambiente/2023-01-31/mas-arboles-en-las-ciudades-menos-muertes-por-calor.html

Arbolado Urbano
El 26 de Abril de 2018 el intendente Enrique Cresto ponía en marcha en Concordia un Programa Municipal Integral de Arbolado Urbano. El primer paso fue realizar un censo porque no había nada de información. Los datos recolectados fueron significativos ya que de un total de alrededor de doscientas manzanas de la zona céntrica donde se relevó “árbol por árbol”, identificando las especies y las condiciones de cada uno como así también del lugar en donde estaba y tras procesar toda esa información, se encontraron con que “solo hay 3.500 árboles”. De ese número, “más del 70%, o sea unos 2.500, son fresnos, espumillas y ligustro”. El programa también buscaba reactivar el Vivero Municipal, del cual iban a salir los ejemplares que serán plantados, y se trabaja en forma articulada con instituciones y comerciantes en su implementación.
Desde el programa municipal se señalaba que saben que cuantos más haya, “más son los beneficios porque no solo dan sombra sino que ayudan a disminuir las temperaturas, dan protección ante la presencia de los vientos además de generar un ecosistema diferente donde conviven distintas especies de flora y fauna”.
Además, se indicaba que se iba a trabajar en plantar especies nativas o autóctonas de la región. Cada árbol iba a ser plantado con un tutor para asegurar una buena condición de desarrollo, además de poner una protección para que las raíces no invadan las viviendas o levanten las veredas. Las especies que se iban a plantar provendrán tanto del Vivero Municipal, de viveros privados como así también de otros organismos como el INTA, por ejemplo. En cuanto al rol del frentista, se especificaba que cada uno deberá cuidarlo y ser consciente de que el árbol le pertenece al Municipio y no al frentista por lo que no pueden intervenirlo, ya sea con una poda o una extracción.
DIARIOJUNIO quiso saber más sobre el plan de Arbolado Urbano, hasta donde se avanzó, que es lo que falta, etc. pero el mensaje y el llamado al director de Parques y Jardines no obtuvieron respuesta.
Tres árboles plantados por uno caído
A pesar de lo expuesto, hay avenidas de la ciudad que tienen un arbolado abundante. Las avenidas Gerardo Yoya (excepto en el tramo que cruza el arroyo Manzores), justamente la arteria de ingreso al parque San Carlos, y Eva Perón son las emblemáticas. Calle Chabrillón, desde Eva Perón hasta Yoya también. Y, el contraste son calles como Tucumán, Damián P. Garat o Rivadavia: son pocos o no hay árboles. “Antes Los Sauces estaban llenos de sauces. Se ha caído”, indicó. “Lo que hay que hacer es fácil: si se te cae un árbol planta tres arboles más”, remarcó.
“Yo sueño con que haya espacios llenos de árboles”, dijo por último Liliana. “Si hay más árboles, va a haber más sombra, más aire limpio, menos contaminación, más oxigenación”, añadió.

Informe: Guillermo Coduri