“Somos un grupo de padres y madres preocupados por la educación de nuestros hijos que decidimos unirnos en una causa común. Durante un período considerable, nuestra escuela ha enfrentado numerosos desafíos que afectan directamente a nuestros hijos e hijas. Uno de los problemas más urgentes es el tema del agua contaminada. Resulta alarmante pensar que nuestros niños y niñas han estado expuestos a esta situación durante tanto tiempo sin una solución definitiva. Dado que se han registrado diversos casos con problemas de salud, derivados directamente de esta problemática. ( Gastroenteritis, etc)
Además, hemos experimentado inconvenientes con el sistema de gas y la cocina, lo cual pone en riesgo la seguridad y la calidad de los alimentos que se les proporciona diariamente.
A esto se suman los faltantes de suministros básicos para la cocina, lo cual dificulta la correcta preparación de las comidas.
Es inaceptable que nuestros hijos e hijas no reciban una alimentación adecuada debido a la falta de recursos.
Asimismo, queremos destacar la falta de comunicación por parte de la dirección de la escuela. Nos hemos encontrado con una escasa transparencia y poca disposición para abordar estos problemas de manera efectiva.
Como padres autoconvocados, consideramos que es nuestro deber y responsabilidad informar a toda la comunidad sobre esta situación.
Esperamos que esta carta abierta genere conciencia y acción por parte de las autoridades escolares y las instancias correspondientes. Nuestros hijos e hijas merecen un entorno seguro, saludable y propicio para su desarrollo educativo. Juntos, como comunidad, podemos lograr que se tomen las medidas necesarias para solucionar estos problemas y garantizar un futuro mejor para nuestros hijos. Cabe destacar en este sentido, el apoyo y participación de varios docentes y personal de la casa que se nos unieron en diversos trámites en pos de la búsqueda de soluciones”.
